Posteriormente, este mismo medio ha informado de que el presidente de la Asamblea Nacional, Moussa Tiembiné, "ha sido secuestrado en su domicilio oficial por hombres armados esta mañana". Asimismo, han circulado informaciones de que entre los detenidos también estaba el ministro de Exteriores, Tiebilé Dramé, así como el hijo del presidente, Karim Keita.
Sin embargo, a falta de confirmación oficial sobre el paradero de dichos altos cargos, el propio Karim Keita, que es diputado, ha desmentido en su cuenta en Twitter que él o el primer ministro, Boubou Cissé, hayan sido detenidos. "Falso. 'Stop' a los rumores", ha subrayado.
Por otra parte, en la base militar de Kati, una localidad situada a unos 15 kilómetros de Bamako, se han escuchado disparos este martes, según han indicado residentes a la emisora Radio France International. De acuerdo con este medio, el acceso a la base militar no es posible y la carretera ha sido cortada. Kati se encuentra cerca de Koulouba, donde está el palacio presidencial.
De acuerdo con las fuentes consultadas por el diario 'Jeune Afrique', hombres armados a bordo de vehículos pick-up han irrumpido en la base, donde se ha producido un intercambio de disparos con los militares presentes en la misma. Algunos periodistas locales y medios como Deutsche Welle han informado de la presencia de soldados en la sede de la televisión nacional, ORT, sin embargo esta ha retransmitido con normalidad el noticiario de las 13.00 horas. También han circulado en redes sociales algunos mensajes que identifican a los militares detrás de la supuesta intentona golpista.
El ministro de Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian, ha asegurado que su Gobierno observa "con preocupación" la evolución de lo que ya ha descrito como un "motín". Francia, ha añadido en un comunicado, "condena con la máxima firmeza este grave suceso" y "reafirma con fuerza su pleno apoyo a la soberanía y a la democracia malienses".
Le Drian ha situado a Francia del lado de la Comunidad Económica de Estados del África Occidental (CEDEAO), un bloque regional que también se ha pronunciado en un comunicado para pedir respeto al "orden constitucional" en Malí e instar a los militares a "volver cuanto antes a sus cuarteles". La CEDEAO ha apelado al diálogo para resolver cualquier disputa, teniendo en cuenta que Malí ya vive un contexto sociopolítico "muy complejo" y, aunque ha defendido su labor de mediación, ha advertido de que tomará "todas las medidas y acciones que sean necesarias" para mantener las instituciones y hacer frente al "motín". Por su parte, el enviado especial para el Sahel de Estados Unidos,
J. Peter Pham, ha indicado que Washington sigue "con inquietud la evolución de la situación" en Malí. "Estados Unidos se opone a cualquier cambio de gobierno al margen de la Constitución, ya sea por quienes están en las calles o por las fuerzas de seguridad y defensa", ha advertido.