Donald Trump quiere acabar con la guerra en Ucrania. Es uno de los objetivos que el presidente de Estados Unidos se propuso cumplir en sus primeros cien días de mandato, y ya ha dado el primer paso para ello.
Este miércoles, en una conversación telefónica de más de una hora, Trump y su homólogo ruso, Vladímir Putin, se comprometieron a iniciar de "inmediato" negociaciones para poner fin a la guerra, que dura ya más de dos años.
Ambos líderes expresaron su deseo de detener las muertes causadas por el conflicto y acordaron que sus equipos comenzaran las negociaciones lo antes posible.
El equipo negociador estadounidense estará integrado por el secretario de Estado, Marco Rubio; el director de la CIA, John Ratcliffe; el asesor de Seguridad Nacional, Michael Waltz; y el enviado especial del presidente Steve Witkoff, según ha precisado Trump en su perfil de Truth Social, su propia red social.
Tras su conversación con Putin, Trump también habló con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, que agradeció el intento de poner fin a la guerra, pero dejó claro que cualquier acuerdo alcanzado debe garantizar la soberanía y la integridad territorial de Ucrania.
Trump siempre ha defendido que la invasión rusa de Ucrania no se habría producido si él hubiera estado en la Casa Blanca e incluso, antes de regresar a la Presidencia de Estados Unido, aseguró ser capaz de poner fin al conflicto con apenas unas llamadas a Putin y Zelenski.
¿Puede acabar Trump con la guerra en Ucrania?
El acuerdo entre Trump y Putin supone el primer paso para la apertura a negociaciones, pero su éxito dependerá de las intenciones reales de Rusia y la disposición de Ucrania a acatar los términos que se negocien, ya que las líneas rojas de Zelenski pasan por mantener la soberanía y la integridad territorial. Ucrania no aceptará acuerdos que impliquen concesiones a Rusia en sus territorios ocupados. Este punto es crucial, ya que Ucrania exige la retirada total de las fuerzas rusas de su territorio antes de cualquier acuerdo formal de paz.
Trump descarta algunas reivindicaciones de Zelenski
El presidente de Estados Unidos no ve realizables algunas aspiraciones de Ucrania a largo plazo, como que el país quede amparado por el paraguas de seguridad de la OTAN. Afirmó que la aspiración de Ucrania a formar parte de la OTAN no es "práctica" y consideró "poco probable" que el país logre recuperar todo el territorio que Rusia le ha arrebatado desde 2014, en el que se incluye la península de Crimea.
Otro factor que puede ralentizar el acuerdo es la desconfianza de Europa sobre las intenciones reales de Putin. El líder ruso se muestra dispuesto a alcanzar un acuerdo de paz, mientras su ejército sigue bombardeando Kiev. Un reciente ataque con misiles y drones sobre la capital de Ucrania ha dejado un muerto y al menos cuatro heridos, entre ellos un niño, lo que generado grandes dudas sobre la disposición de Rusia para terminar con el conflicto a corto plazo.
Además, la guerra en Ucrania no solo involucra a Rusia y Ucrania, sino también a la OTAN y la Unión Europea. La postura de los aliados de Ucrania será clave para alcanzar cualquier acuerdo de paz entre los dos países.
Por otro lado, por muchas ganas que tenga Trump de acabar con la guerra en dos días, el presidente estadounidense necesita el apoyo de su gobierno y de otros actores dentro de EE.UU. para establecer cualquier acuerdo. Instituciones y dirigentes de su país, y de Europa, podrían rechazar un acercamiento a Putin si éste se concibe como una rendición a Rusia o cesiones innecesarias.
¿Acuerdo de paz o rendición a Rusia?
En Bruselas, el secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, afirmó este jueves que las iniciativas de Estados Unidos para poner fin a la guerra en Ucrania no son "una traición" a Kiev. "Sin duda, no es una traición", declaró el político a su llegada a la reunión de ministros de Defensa de la OTAN que se celebra en Bruselas.
"Estados Unidos ha invertido en estabilizar esas líneas del frente tras la agresión de Rusia. No hay traición ahí. Hay un reconocimiento de que todo el mundo y Estados Unidos están dedicados e interesados en la paz, una paz negociada, como ha dicho el presidente Trump, que ponga fin a las matanzas", aseveró.
Sin embargo, el ministro de Defensa de Bélgica, Theo Francken, aseguró que el marco para un plan de paz en Ucrania esbozado por Estados Unidos es "toda una victoria" para el presidente ruso y "malas noticias para Occidente".
En declaraciones a la radio pública flamenca VRT, Francken consideró que Putin "siempre ha dicho que no quiere que Ucrania se convierta en miembro de la OTAN y que no debería tener que renunciar a ningún terreno que haya ganado".
