La Guardia Costera estadounidense comunicó de manera oficial a última hora de la tarde de este jueves que el robot que estaba inspeccionando las profundidades en busca de alguna pista del Titan había encontrado restos que se correspondían con el submarino desaparecido. Por tanto, confirmó el fallecimiento de los cinco tripulantes que iban a bordo y explicó que el motivo se debía a una "implosión catastrófica" de la nave.
El Titán inició su viaje el domingo con el objetivo de sumergirse hasta los 3.800 metrosde profundidad en los que se encontraban los restos del Titanic. Algo más de una hora después de que se sumergiese, se perdió la comunicación con el submarino. Las autoridades creen que fue en este momento cuando se produjo la implosión. De hecho, medios como el Washington Post y el Wall Street Journal han publicado que la Armada estadounidense escuchó -gracias a un sistema secreto de detección de sonidos en el fondo del mar- un extraño sonido que ahora identifican como el momento en que se produjo el accidente.
Los restos del submarino se encontraron a 500 metros de la proa del Titanic y estaban repartidos por cinco lugares: se encontró el tren de aterrizaje y la cubierta de la proa trasera del submarino, lo que llevó a los expertos a concluir que el submarino no aguantó la presión y reventó. De ahí que estableciesen una "implosión" como la causa de la tragedia.
¿Qué es una "implosión catastrófica"?
Pero, ¿qué es una "implosión catastrófica", tal y como la definió el contraalmirante de la Guardia Costera? En física, una implosión tiene los efectos contrarios a los de una explosión. Mientras en la explosión, el objeto va de dentro hacia afuera, en la implosión se produce al revés: el objeto se contrae hacia dentro y revienta. ¿El motivo? Que la presión exterior es mayor que la del interior.
Hay que recordar que el Titanic se encuentra a 3.800 metros de profundidad, por lo que es posible que la fuerte presión de ese ambiente fuera mayor que la del submarino. El resultado: probablemente se deformó la estructura de la nave hacia dentro (algo parecido a cuando aplastamos una lata) y reventó, acabando instantáneamente con la vida de sus cinco tripulantes. Las causas que provocaron la implosión todavía son un misterio. Algunos expertos teorizan con que la mínima fisura o grieta en el casco de la nave pudo resultar fatal a esa profundidad.
Una simulación recrea lo que pudo suceder con el Titan
Algunos medios de comunicación han publicado que la implosión del submarino pudo haberse producido poco antes de llegar al destino final, los restos del Titanic. Una simulación difundida a través de las redes sociales muestra lo que pudo haber sucedido con el Titán.
Las condiciones de seguridad que se obviaron al crear el Titan
El contexto de la desaparición del submarino y posterior confirmación de la tragedia es inquietante. Han salido a la luz informes que detallan documentos judiciales de un caso de 2018 que muestran que OceanGate, la empresa responsable del sumergible, despidió al empleado David Lochridge después de que expresara su preocupación por la seguridad del Titan.
Lochridge no estaba de acuerdo con OceanGate y se opuso a la decisión de la empresa de empezar las inmersiones sin realizar previamente "pruebas no destructivas" al casco del buque para demostrar su integridad.
También en 2018, una carta enviada a OceanGate por el Comité de Vehículos Submarinos Tripulados de la Sociedad de Tecnología Marina, firmada por 38 expertos, expresaba reservas sobre la seguridad del sumergible. Decían que el "enfoque experimental adoptado por OceanGate podría dar lugar a resultados negativos (de menores a catastróficos) que tendrían graves consecuencias para todos en la industria".
Como se desprende de estos intercambios, la ingeniería y la reglamentación de los sumergibles de aguas profundas sigue siendo un terreno un tanto inexplorado. Y como el Titán opera en aguas internacionales, técnicamente está libre de gobernanza por la normativa de cualquier nación.