El ministro francés de Interior, Christophe Castaner, acompañado por el alcalde de la ciudad, Roland Ries, recorrieron desde las 11.00 hora local (10.00 GMT) las calles, en torno a la catedral, donde está instalado el mercado, en particular para saludar a los policías y militares que se ocupan de la seguridad.
La reapertura se produjo apenas once horas después de que fuera abatido anoche por la policía el autor del atentado, Chérif Chekatt, de 29 años, en el barrio de Neudorf, al sur de la ciudad, del que era originario.
El de Estrasburgo es el mercado de Navidad con más tradición en Francia y el más antiguo. Ya había sido objeto de una tentativa de atentado yihadista en 2000, pero entonces el comando terrorista fue desarticulado por las fuerzas del orden.
Chekatt, un delincuente reincidente (había sido condenado en 27 ocasiones en Francia, Alemania y Suiza), cometió el ataque con una pistola horas después de que las fuerzas del orden hubieran intentado detenerlo en su domicilio -del que estaba ausente- por las acusaciones que pesaban sobre él por su presunta implicación en una tentativa de homicidio.