El pueblo ruso ha salido este miércoles a la calle a protestar tras la movilización parcial anunciada por Putin en el marco de la campaña militar de Rusia en Ucrania. Más de 1.000 personas han sido detenidas en 38 ciudades del país en la protesta nacional organizada por un movimiento pacifista.
Según la organización independiente OVD-Info, en Moscú había al menos 409 detenidos y en San Petersburgo 444, aunque el registro de detenciones aumenta rápidamente. En el centro de la capital, cientos de manifestantes se congregaron al grito de "no a la guerra", "Putin a la trinchera" o "la policía es la vergüenza de Rusia".
Anuncio de movilización parcial
Vladimir Putin ha anunciado este miércoles una "movilización parcial" de la población en plena guerra en Ucrania, donde las fuerzas rusas han sufrido varios varapalos en las últimas semanas a raíz de una serie de contraofensivas de las tropas ucranianas.
El líder del Kremlin ha explicado que se reclutará solo a "ciudadanos que se encuentran actualmente en la reserva y, sobre todo, a aquellos que sirvieron en las filas de las fuerzas armadas".
Según Putin, la falta de armamento es la responsable de los fallos de las tropas rusas en Ucrania, y ha asegurado que hará todo lo que esté en su mano para defender su territorio, algo que se ha interpretado como que recurrirá a armamento nuclear si es necesario.
Billetes agotados
Según 'The Moscow Times' los billetes empezaron a escasear desde minutos después del mensaje televisado de Putin y se han sucedido los vídeos de civiles rusos saliendo de sus fronteras en avión, en tren e, incluso, a pie, hacia otros países de la UE. Los destinos más buscados son en países que no requieren visado, como Armenia, Azerbaiyán o Turquía.
Entre las búsquedas más frecuentes en Google en el país se encuentra "cómo romperse un brazo", ya que es una de las excusas válidas para no acudir a la Guerra.
Los ministros de Exteriores de la UE se reúnen de urgencia
Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea celebran este miércoles una reunión extraordinaria en Nueva York, donde se encuentran con motivo de la Asamblea General de la ONU.
El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, ha advertido de que la paz mundial "está en peligro" por la "grave escalada" que suponen las últimas decisiones del Kremlin.
Varios países europeos han interpretado estos últimos anuncios como una señal de debilidad por parte de Rusia. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha declarado que Putin "ha asumido que está perdiendo la guerra"; el canciller alemán, Olaf Scholz, ha calificado la movilización de reservistas como un "acto de desesperación"; y el presidente francés, Emmanuel Macron, ha pedido a todos los países del mundo "máxima presión" sobre Putin.