Según el último informe de Save the Children, el 1% de la población infantil de Gaza ha muerto a causa de la ofensiva del Ejército israelí. Las autoridades de la Franja, controladas por Hamás, denuncian hasta la fecha más de 23.400 fallecidos y calculan que otros 7.000 cadáveres -entre ellos los de miles de niños- continúan bajo los escombros.
Save the Children denuncia una “monstruosa situación” en Gaza, una “lacra para la humanidad común”, que la comunidad internacional no ha sido capaz de frenar.
Mueren 100 niños de media cada día
Arantxa Oses, pvoz de Save the Children, lamenta que cada día que se retrasa el alto el fuego definitivo en la Franja mueren de media un centenar de niños. El resto viven aterrorizados, mutilados o desplazados. Recuerda la ONG que los que sobreviven a la violencia sufren lesiones que les cambian la vida: quemaduras, enfermedades, atención medica inadecuada y la perdida de sus padres y otros seres queridos. El daño mental infligido y la devastación -según el informe- acabarán diezmando su futuro.
Otros muchos niños gazatíes corren el riesgo de morir de hambre o por culpa de las enfermedades.