A medida que pasan los días, el conflicto bélico se ha recrudecido, especialmente en Járkov, la segunda ciudad más importante de Ucrania, donde la fuerzas del Kremlin han intensificado los ataques en zonas urbanas muy pobladas dejando decenas de muertos.
Kiev puede ser el objetivo final de la campaña militar enemiga, pero Járkov está recibiendo ahora casi todos los golpes de la máquina de guerra rusa. En las últimas horas los ataques aéreos rivales también han golpeado al menos a tres escuelas y a la Catedral de la Asunción. Además, varias obras de arte enmarcadas y vidrieras se habrían roto por las explosiones de un ataque contra un edificio cercano al Ayuntamiento.
En esa misma ciudad, un soldado ucraniano estaba grabando un vídeo cuando aprecia algo en el cielo y fija la mirada hacia arriba. A pocos metros de él impacta un misil ruso sobre un edificio y le empiezan a caer escombros de la infraestructura encima. A pesar de la explosión y la destrucción de la fachada, el militar no ha resultado herido. En la grabación se puede apreciar el sonido de los cristales rotos tras colisionar el misil en las ventanas.
Rusia alerta de una posible catástrofe humanitaria en varias ciudades ucranianas
El Centro Nacional de Dirección de la Defensa de Rusia ha convocado una reunión ante "la inminencia de una catástrofe humanitaria en Mariúpol". Asimismo, el militar Mijaíl Mízintsev también ha advertido de "la posibilidad de catástrofes humanitarias" en las en las ciudades de Kiev (3 millones de habitantes), Járkov (1,5 millones), Sumy (hasta 300.000).
Mizintsev denuncia que quienes mantienen el control de estas tres ciudades cometen "atroces actos terroristas" y los define como "nacionalistas ucranianos" e "indignantes".