EN CALIFORNIA

Solicitantes de asilo en EEUU acusan a varios guardias de un centro de detención de abusos y tortura

Un grupo de solicitantes de asilo ha acusado a varios guardias de seguridad de un centro de detención de inmigrantes en el estado de California, en el oeste de Estados Unidos, de haber utilizado esprays de pimienta y duchas de agua hirviendo para acabar con una huelga de hambre.

ondacero.es

Madrid |

Niños enjaulados en la frontera de EEUU | Onda Cero

Según la ONG Human Rights Watch (HRW), que ha denunciado el estado en el que se encuentran los solicitantes de asilo en algunos centros, al menos tres personas han muerto debido a la mala asistencia médica recibida durante los últimos ocho años en el centro de detención Adelanto, cerca de San Bernardino, en el sur de California.

En dicho centro los guardias habrían golpeado, además, a ocho inmigrantes centroamericanos que se habían declarado en huelga de hambre, tal y como han expresado los abogados de dos de ellos.

El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por su sigla en inglés) de Estados Unidos se ha negado a responder a las acusaciones recogidas en una demanda presentada por los inmigrantes en cuestión. "Sin embargo, la falta de comentarios no debe interpretarse como un acuerdo o estipulación de alguna de las acusaciones", ha manifestado la portavoz del ICE, Lori K. Haley, en un correo electrónico.

Los ocho hombres anunciaron que tenían previsto declarar una huelga de hambre el 12 de junio del 2017 para protestar pacíficamente por la falta de acceso a agua potable, alimentos de calidad o ropa limpia en Adelanto, tal y como estipula el texto de la demanda, que señala que estos llegaron a Estados Unidos tras huir de grupos delictivos violentos en El Salvador y Honduras.

Los guardias habrían respondido haciendo uso de espray de pimienta contra los solicitantes de asilo y golpeando a algunos de ellos y colocando a los hombres en aislamiento durante al menos diez días, lo que provocó el fin del a huelga de hambre a los dos días de su comienzo.

"Nos miraban como si fuéramos peores que criminales, porque no creo que tratarían a los criminales como lo hicieron con nosotros", ha afirmado Alexander Antonio Burgos Mejía, de 29 años, que se encuentra entre los demandantes. Burgos, procedente de Honduras, ha sido puesto en libertad bajo fianza mientras busca asilo.

Otro de los inmigrantes afectados, Josué Mateo Lemus Campos, de 25 años, también se encuentra en libertad bajo fianza y ha explicado durante una rueda de prensa que las duchas con agua hirviendo le causaron un "dolor insoportable".