Un talibán y sus cuatro hijos han muerto este miércoles tras estallar un explosivo que el insurgente iba a utilizar para perpetrar un atentado, según han informado las autoridades locales.
El portavoz del gobierno provincial, Zabiulá Amani, ha detallado que el suceso tuvo lugar en el interior de una vivienda en la localidad de Qosh Tapa, en la provincia de Kunduz (norte), tal y como ha recogido la agencia afgana de noticias Jaama Press.
Por el momento, los talibán no se han pronunciado sobre lo ocurrido. Los insurgentes utilizan explosivos frecuentemente para atentar contra las fuerzas de seguridad, funcionarios y civiles en el país.