"Estoy leyendo que el gran MURO fronterizo costará más de lo pensado por el Gobierno, pero aún no estoy implicado en negociaciones o el diseño. Cuando lo haga, tal y como pasó con el caza F-35 o el programa del Air Force One, el precio bajará MUCHÍSIMO", escribió el mandatario en la red social Twitter con mayúsculas para enfatizar.
Trump volvió a hablar del muro, algo que no hacía desde el 26 de enero cuando aseguró que México debería pagar por el muro para frenar la inmigración ilegal, algo que calentó los ánimos de Los Pinos y llevó a la cancelación de visita prevista del presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, a la Casa Blanca.
Pese a la cancelación del encuentro, México consiguió un compromiso para que la administración de Trump no demandara en público sobre el pago del muro por parte de los mexicanos, algo para lo que el equipo de Trump había sugerido aranceles a las importaciones mexicanas.
El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, aseguró a finales de enero que el Congreso está dispuesto a facilitar fondos para la construcción del muro fronterizo con México, para lo cual estimaban un presupuesto entre 13.000 y 15.000 millones de dólares. Estimaciones como la firma Bernstein Research, que elabora informes sobre tendencias de inversión, elevan el precio del muro con México a los 25.000 millones de dólares, el doble de lo que costaría una nueva autopista de costa a costa en el vasto Estados Unidos.
Trump ha conseguido compromisos con Lockheed Martin y Boeing para reducir el coste de caza F-35 y de la construcción de Air Force One, después de criticar los presupuestos presentados y amenazar a esas empresas con cancelaciones.