Trump quiere un muro "lo más grande posible" y que permita ver el otro lado
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo hoy en su visita en California a los prototipos del muro fronterizo que quiere que esta infraestructura sea "lo más grande posible" y que permita, de alguna manera, ver el lado mexicano de la frontera.
"Cuanto más grande sea, mejor, porque es muy difícil superarlo por arriba", dijo Trump a los medios tras inspeccionar los prototipos construidos en un área entre Otay Mesa (EE.UU.) y Tijuana (México).
El presidente de EE.UU. aseguró que "increíbles" escaladores profesionales no han podido trepar por algunos de estos prototipos,y destacó que están buscando un tipo de muro que permita cierta visibilidad del otro lado y que tenga hormigón o acero en su parte superior.
Asimismo, Trump defendió que el muro es "la primera y última defensa" de Estados Unidos para proteger su territorio. "El muro fronterizo es en verdad nuestra primera línea de defensa, y es, probablemente si lo pensáis, nuestra primera y última (defensa) más allá de los grandes agentes del ICE (el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas) y otra gente", señaló el mandatario.
El muro "salvará miles y miles de vidas, y ahorrará cientos de miles de millones de dólares a los contribuyentes, reduciendo el crimen, el tráfico de drogas, el fraude en ayudas sociales y los problemas de escuelas y hospitales", afirmó.
Trump argumentó que levantar el muro permitirá ahorrar un dinero equivalente a "muchísimas veces" lo que costaría construirlo. El presidente estadounidense también urgió al Congreso a que autorice el presupuesto para construir el muro, un proyecto estancado en estos momentos ante la falta de financiación.
Trump ha prometido que serían los propios mexicanos quienes pagaran por la construcción de la polémica frontera, pero es algo a lo que México se opone de forma frontal, por lo que está tratando de justificar la rentabilidad económica de una obra de tanta envergadura.
Por primera vez desde que es presidente de Estado Unidos, Trump visita California, un estado que se ha declarado abiertamente en contra de sus políticas en temas como inmigración, sanidad o cambio climático.
Trump aseguró que California está "fuera de control" y afirmó que el gobernador californiano, Jerry Brown, está haciendo un "trabajo
terrible" en su cargo.
El presidente criticó los "altos impuestos" de California y aseguró que las políticas "santuario" (en referencia a las ciudades y condados que decidieron no colaborar con las autoridades federales migratorias) están poniendo "a todo el país en peligro".
"Son el mejor amigo de los criminales, eso es exactamente lo que está sucediendo. Los criminales se están refugiando en las ciudades 'santuario'", dijo.
Respecto a las relaciones con México, que están en un momento muy delicado por la construcción del muro, Trump dijo que la colaboración con este país "es otro elemento crucial" de la seguridad en la frontera.
Y pese a que sus posturas sobre el polémico muro han frustrado en dos ocasiones una reunión con el presidente de México, Enrique Peña Nieto, Trump aseguró que tiene "una gran relación" con él y señaló que es "un tipo maravilloso" con el que espera resolver sus diferencias.