El mandatario estadounidense ha sido muy criticado por culpar también de los disturbios a los grupos de izquierda que se movilizaron en la zona para hacer frente a los ultraderechistas. Trump, que tardó dos días en condenar expresamente a los neonazis, supremacistas blancos y seguidores del Ku Klux Klan (KKK) que se manifestaron contra la retirada de una estatua de Robert E. Lee --un comandante del Ejército Confederado--, ha subrayado que "hay algunos hombres muy malos también en el otro lado".
"Debido a todo lo que ha pasado desde entonces con Antifa --en referencia a los antifascistas que se enfrentaron a los neonazis y supremacistas--, si se mira lo que realmente pasó en Charlottesville, mucha gente dice, de hecho mucha gente ha escrito: 'Trump podría tener razón'", ha defendido. "Dije: 'Tenéis también gente muy mala en el otro lado', lo que es verdad", ha recalcado, según ha informado el diario estadounidense 'The New York Times'.
Trump se ha referido así al encuentro que mantuvo el miércoles con Tim Scott --el único senador republicano negro--, resaltando que "fue una gran conversación" y añadiendo que son amigos. Por su parte, Scott ha asegurado que fue a la Casa Blanca para negar que "ambas partes" fueran responsables de lo sucedido en Charlottesville, si bien ha reconocido que no esperaba que Trump fuera a cambiar de idea, y que no lo hizo.
"El es quien ha sido, y no fui para cambiar quién es. Quería informar y educar una perspectiva diferente. Creo que lo logré. Asumir que justo después vaya a tener una epifanía no es realista", ha zanjado. Trump ha firmado este mismo jueves una resolución no vinculante del Congreso reclamándole que condene a grupos como los supremacistas blancos y el Ki Klux Klan.