El presidente Bill Clinton (1993-2001) fue el primero en declarar junio como el mes del Orgullo LGTBI, pero la tradición no continuó bajo el presidente George W. Bush (2001-2009), algo que sí retomó sin embargo la Casa Blanca del anterior mandatario, Barack Obama.
El secretario de Estado, Rex Tillerson, reconoció el mes del Orgullo Gay una semana después de su comienzo, condenando "la violencia y la discriminación" contra la comunidad LGTBI en el extranjero.
"En reconocimiento del Mes LGTBI, el Departamento de Estado afirma su solidaridad con los defensores de derechos humanos y las organizaciones de la sociedad civil que trabajan alrededor del mundo para mantener las libertades fundamentales de las personas lesbianas, gais, transgéner, bisexuales e intersexuales para que puedan vivir con dignidad y libertad", apuntó la cartera en un comunicado.
Asimismo, la hija del mandatario, Ivanka Trump, destacó la celebración apenas comenzó el mes.
"Este mes celebramos y honramos a la comunidad #LGTBI", escribió ella el 1 de junio.
El silencio del magnate sorprende en parte ya que durante la campaña electoral defendió algunos derechos de los homosexuales.
El pasado mes de octubre, posó con una bandera arco iris en Colorado y en julio prometió a una multitud, en su mayoría conservadora, que "haría todo" lo que estuviera en su mano "para proteger a los ciudadanos LGTBI de la violencia y la opresión de la odiosa ideología extranjera".