Un portavoz de Twitter confirmó esa medida adoptada en septiembre y octubre por la red social, que según informes de prensa afectó a más de 10.000 cuentas conocidas popularmente como "bots" por los tuits que publican de manera programada.
"Hemos eliminado una serie de cuentas por implicarse en intentos de difundir desinformación de forma automatizada, lo que supone una violación de nuestras políticas. Detuvimos esto rápidamente y de raíz", aseguró el portavoz de Twitter en un correo electrónico.
Las cuentas tenían en sus perfiles o mensajes rasgos que las vinculaban falsamente al Partido Demócrata, algo que detectó el Comité Demócrata de Campañas al Congreso (DCCC, en inglés) y lo comunicó a Twitter para que actuara, de acuerdo con la cadena CNN.
El portavoz de Twitter reconoció que la compañía tiene "líneas de comunicación directas" con "las organizaciones de campaña de los dos principales partidos" políticos de EE.UU., con el objetivo de evitar que su plataforma se utilice para interferir indebidamente en el proceso electoral.
La campaña para promover la abstención en nombre de los demócratas tuvo su origen al parecer dentro de Estados Unidos, según fuentes familiarizadas con el caso, y Twitter no sospecha de ninguna injerencia extranjera.
Los gigantes de Internet han redoblado en los últimos meses sus esfuerzos para evitar que en las elecciones legislativas se vuelvan a utilizar sus plataformas para promover noticias falsas o implementar esfuerzos coordinados de injerencia electoral, como
ocurrió en las elecciones presidenciales de 2016.
Según los servicios de inteligencia estadounidenses, en esa ocasión piratas informáticos rusos lanzaron una operación coordinada en internet para influir en los resultados a favor del entonces candidato republicano y actual presidente Donald Trump.
Twitter, en concreto, ha centrado sus esfuerzos estos meses en identificar cuentas falsas, que son muy comunes en la red social dada la relativa facilidad con la que pueden ser creadas, y la compañía asegura haber eliminado "decenas de millones" de ellas en todo el mundo.
Sin embargo, un informe publicado por la Fundación Knight dedicada al estudio del periodismo reveló que más del 80 % de las cuentas de Twitter que propagaron de forma reiterada información falsa en 2016 todavía siguen activas y envían en conjunto más de un millón de mensajes al día.