A escasos meses de que se cumplan tres años de la invasión rusa a Ucrania (febrero 2022) la guerra está protagonizando un escenario de intensidad creciente. En el día de hoy Rusia ha reconocido nuevos ataques ucranianos con misiles estadounidenses ATACMS (de largo alcance), esta vez contra la región de Kursk.
Los ataques se han producido después de que Rusia lanzase la semana pasada un misil hipersónico (sin carga nuclear) contra Ucrania. Una ofensiva que se ha visto intensificada durante esta madrugada después de que el país que gobierna Vladimir Putin haya lanzado más de 180 drones contra territorio ucraniano.
“Según datos confirmados, en los últimos días las Fuerzas Armadas de Ucrania han llevado a cabo dos ataques con armas occidentales de largo alcance contra objetivos en la región de Kursk”, ha informado el Ministerio de Defensa ruso. “Se preparan acciones de respuesta”.
El mando militar ruso ha reconocido que este sábado Kiev atacó con cinco misiles ATACMS las posiciones de una división de misiles antiaéreos S-400 junto a la localidad de Lotariovka, 37 kilómetros al noroeste de Kursk, la capital de la región homónima, que ya había sido atacada hace una semana con misiles británicos Storm Shadow. De esos cinco misiles, dos alcanzaron su objetivo y causaron daños a un radar y dejaron heridos entre el personal militar.
Ucrania responde
Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania, ha informado de que “Rusia atacó a Ucrania y lanzó un número récord de drones”. En concreto, según reza en el mensaje publicado en X (antes Twitter), son 188 los drones que habría lanzado el Kremlin contra territorio ucraniano.
“Lamentablemente, nuestra infraestructura crítica ha sufrido daños y la situación en Ternopil sigue siendo complicada”, ha señalado. “Todos los servicios y equipos de reparación están en el lugar y hacen todo lo posible para ayudar a la gente y restablecer el suministro eléctrico lo antes posible”.
Kiev reclama más apoyo militar
Ante un contexto en el que la ofensiva parece estar experimentando un nuevo proceso de escalada, el ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Andrí Sibiga, ha pedido al G7 que incremente el apoyo militar a Ucrania.
“Debido a la expansión de la guerra en Ucrania, la seguridad en Europa y en la región Indo-Pacífica están ahora directamente conectadas”, ha señalado Sibiga en un comunicado de su ministerio, al aludir a la incorporación a las tropas rusas que combaten contra Ucrania de unos 11.000 soldados norcoreanos.
“La agresión rusa supone una amenaza global y requiere una respuesta global, principalmente mediante un incremento significativo en el apoyo de Ucrania y mediante la paz a través de la fuerza”.