El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó de que esta mañana llegaron a la provincia de Idleb (noroeste) cuatro autobuses que salieron de Beit Yin, con unos 100 combatientes del Organismo de Liberación del Levante (alianza de la exrama de Al Qaeda en Siria).
Por otra parte, seis vehículos llegaron durante la madrugada a la provincia meridional de Deraa, con otros 100 combatientes y unas 30 familias de estos y de civiles que rechazaron el acuerdo con las autoridades de Damasco, que de esta forma pasan a dominar toda la región al suroeste de la capital.
El Observatorio detalló que aquellos que permanecen en Beit Yin y la vecina Magar al Mir, y rechacen quedarse en la zona bajo el control del Gobierno, serán trasladados posteriormente a Deraa.
El acuerdo de evacuación fue alcanzado entre el Organismo de Liberación del Levante y otras facciones rebeldes e islámicas, por una parte, y las autoridades sirias, por otro, después de semanas de combates entre las dos partes y de intensos ataques aéreos y de artillería por parte del ejército gubernamental sobre la zona.
Las fuerzas sirias lanzaron su ofensiva hace meses pero en los pasados días consiguieron avanzar en áreas al suroeste de Damasco y próximas a la frontera con el Líbano y los Altos del Golán ocupados por Israel, consideradas estratégicas.
El Gobierno sirio ha podido retomar el control de destacadas regiones del país gracias a acuerdos con sus enemigos, que suelen ser evacuados a Idleb, provincia que está controlada casi en su totalidad por el Organismo y otras facciones