Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, y Josep Borrell, alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior, han visitado este viernes una fosa común en Bucha aprovechando su viaje hasta Kiev.
"Hemos visto toda la frialdad del ejército de Putin. Hemos visto la imprudencia y el corazón frío que ellos han tenido al ocupar esta ciudad. Hemos visto la humanidad en pedazos en Bucha. El mundo entero está de luto por lo ocurrido en Bucha", dijo Von der Leyen desde la localidad ucraniana donde al principio de esta semana se desvelaron las matanzas indiscriminadas rusas de civiles ucranianos, algunos maniatados y con signos de tortura.
Junto al primer ministro de Eslovaquia, Eduard Heger, Von der Leyen y Borrell visitaron una fosa común en el patio de la iglesia de San Andrés el Primer Llamado, donde había unos 14 cuerpos en bolsas de plástico que habían exhumado. "Tenemos que defender la frontera con Europa, la humanidad y la democracia y por eso estamos aquí junto a Ucrania", añadió Von der Leyen.
Durante la visita, han estado acompañados por el primer ministro ucraniano, Denys Shmyhal, y el alcalde de Bucha, Anatoliy Fedoruk. "Visitamos Bucha. Le mostré a Von der Leyen, Borrell y Heger las atrocidades cometidas por las tropas militares rusas contra civiles ucranianos. Nunca perdonaremos al enemigo por estos crímenes. Trabajamos con nuestros socios europeos para detener al agresor lo antes posible", escribió en Twitter Shmyhal.
Posteriormente, Von der Leyen, Borrell y Heger han colocado velas en esta iglesia y se han dirigido a la calle Volknalna, una de las más dañadas durante la ocupación de Bucha y donde aún quedan decenas de tanques quemados.
La visita a la localidad de Bucha ha sido la primera parada del viaje de los líderes europeos a Ucrania, donde también tienen previsto reunirse con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, además de Shmyhal y otros altos funcionarios del gobierno; a los que trasladarán un "mensaje de solidaridad" de la UE con el país tras la invasión rusa.
El viaje coincide con la aprobación anoche en la UE del quinto paquete de sanciones contra Rusia por la invasión de Ucrania, que afecta por primera vez al sector energético al prohibir la importación de carbón ruso, además de incluir un embargo de armas hacia Rusia y vetar las exportaciones de alta tecnología a ese país.
"Las últimas sanciones llegan tras las atrocidades cometidas por las fuerzas armadas rusas en Bucha y otros lugares bajo ocupación rusa. El objetivo de nuestras sanciones es detener el comportamiento inhumano y agresivo de las tropas rusas y la agresión ilegal contra Ucrania", compartió en Borrell en sus redes sociales.