La cadena, que cita a fuentes familiarizadas con la investigación, informó de que la comparecencia de Kushner se celebrará a puerta cerrada a finales de junio o principios de julio, aunque todavía no se ha fijado una fecha concreta. Kushner deberá de proporcionar una serie de documentos y luego volver al Congreso para responder a las preguntas de los senadores, según una de las fuentes anónimas que cita ABC.
La comparecencia de Kushner, uno de los asesores más cercanos a Donald Trump, marcaría una nueva fase en las investigaciones que llevan cabo el Congreso y el Buró Federal de Investigaciones (FBI) para averiguar si el Gobierno ruso influyó en las elecciones del año pasado y si se coordinó con la campaña de Trump.
Según varios medios estadounidenses, el FBI ha puesto el foco en Kushner debido a las reuniones que mantuvo con el embajador ruso en EEUU, Serguei Kislyak, y con el banquero Serguei Gorkov, consejero delegado del banco nacional ruso Vnesheconombank y graduado de la academia de los servicios secretos rusos.
Esos encuentros se produjeron supuestamente durante la campaña presidencial y en el periodo de transición, antes de que Trump sustituyera en la Casa Blanca a Barack Obama. La Casa Blanca calificó de rutinarias las reuniones que Kushner mantuvo con Kislyak y Gorkov durante el periodo de transición.
Sin embargo, el 26 de mayo, el diario The Washington Post reveló que Kushner pidió en diciembre al embajador ruso en EEUU que se estableciera un canal de comunicación secreto entre la campaña de Trump y el Kremlin durante el periodo de transición para poder hablar sin la vigilancia de la inteligencia estadounidense.
Esa última revelación ha generado un gran revuelo debido a la cercanía de Trump con Kushner, esposo de la hija mayor del presidente, Ivanka Trump, y que se ha convertido en uno de sus asesores más cercanos, especialmente en temas de política exterior.