Los trastornos autoinmunitarios son aquellos donde las defensas atacan a las células sanas por error. Acorde con los últimos datos, en España cuatro millones de personas padecen artrosis lumbar, gota alrededor de 880.00, artritis reumatoide casi 300.00, artritis psoriásica 215.00 y lupus algo más de 75.000.
A pesar de que son enfermedades que están muy presentes en nuestra sociedad, existe un gran desconocimiento sobre ellas. En nuestro país no existen datos de mujeres y hombres que tienen estas patologías por separado, pero en Estados Unidos se ha visto que ellas son más propensas a tenerlas que ellos, 4 de cada 5.
La artritis reumatoide, la esclerosis múltiple y la esclerodermia son más comunes entre las mujeres. En el caso del lupus y el síndrome de Sjogren la diferencia es mucho más notable, llegando a ser de 9 a 1 y de 19 a 1, respectivamente.
Al ser una diferencia tan clara, un equipo de la Universidad de Stanford (EEUU) ha liderado una investigación para indagar en esa característica principal que diferencia biológicamente a los mamíferos femeninos de los masculinos. Esto podría favorecer el pronóstico de estas enfermedades.
La respuesta está en la segunda X
Los resultados de este estudio vienen publicados en la revista Cell y en España los adelantaba la Agencia SINC. La respuesta la determina la segunda X. En los mamíferos, el sexo biológico lo representan dos cromosomas X en cada célula femenina, mientras que las masculinas tienen un X y un Y. Estos cromosomas X contienen cientos de genes activos que producen proteínas.
El tener dos cromosomas de este tipo conlleva el riesgo de que en cada célula femenina se fabrique el doble de estas proteínas que podría ser letal. para evitarlo se da la llamada "inactivación del cromosoma X, gracias a una molécula llamada Xist. Este elemento hace que se produzca la misma cantidad de proteína en una célula femenina como en una masculina.
Según los expertos ahí parece estar la clave de la gran diferencia entre hombres y mujeres en los trastornos autoinmunitarios. La inactivación de Xist provoca que haya más susceptibilidad a ese tipo de patologías.
Este descubrimiento podría facilitar el descubrimiento de sendas para el desarrollo de fármacos y terapias génicas que curen estas enfermedades.