Este viernes han entrado en vigor las modificaciones al Real Decreto 176/2023 destinado a generar entornos de juego online más seguros; en concreto, las modificaciones a este texto que entró en vigor el año pasado apuntan a garantizar una mayor seguridad para los jugadores en riesgos y los jugadores intensivos, a los que se les prohibirá - por ejemplo- emplear tarjetas de crédito en sus sesiones de juego.
Tal y como ha apuntado el Ministerio de Derechos Sociales, "el objetivo es evitar que los jugadores intensivos y con comportamientos de riesgo puedan jugar a crédito, ya que eso supondría un verdadero riesgo de serios problemas financieros": la normativa indica que los jugadores intensivos son aquellos que han perdido 600 euros semanales durante 3 semanas consecutivas, cantidad que se reduce a 200 euros en el caso de los jugadores jóvenes.
Prohibidas las tarjetas de crédito, o los pagos con medios de terceros
Con el cambio de normativa, los operadores de juego deberán establecer mecanismos y protocolos para detectar patrones de riesgo en las conductas de estos jugadores intensivos. Además de prohibir el uso de tarjetas de crédito, la modificación en la normativa exige métodos de pago nominativos para jugadores en riesgo.
"El objetivo es evitar que un jugador en riesgo que ya ha agotado sus recursos utilice medios de pago de terceras personas (familias, amigos, tarjetas de empresa) para continuar jugando, generando una deuda a una tercer persona que puede desconocer la situación", explica el Ministerio, que ha impulsado otras medidas adicionales: antes de iniciar una sesión de juego, el usuario tendrá que establecer un límite de tiempo y dinero, y los operadores deberán enviar mensajes instantáneos de obligatoria lectura cada 60 minutos, con información sobre el dinero apostado o las cantidades perdidas. Sin embargo, las páginas no podrán mostrar otros mensajes de naturaleza engañosa, como "Casi acertaste" o "Por poco".
Ni material promocional ni retención de grandes premios
Además, los operadores deberán permitir la retirada instantánea de premios superiores a 5.000 euros: para evitar que estos premios tan lucrativos se conviertan en simples cebos para seguir apostando, la normativa marca que la plataforma de juegos deberá facilitar al usuario la retirada de premios, cuando la diferencia entre la cantidad apostada y la ganada sea superior a 5.000 euros.
Además de centrarse estas modificaciones en los jugadores de riesgo y en los jugadores intensivos, la normativa también plantea medidas para los jugadores jóvenes, de entre 18 y 25 años: los operadores de juego online no podrán ofrecer a los jóvenes ningún tipo de promoción ajena a la actividad del juego. Este cambio busca evitar que los jugadores más precoces "obtengan regalos por parte de los operadores de juego que poco o nada tengan que ver con el juego (entradas a partidos, viajes, etc.) pero que le impulsen a gastar grandes cantidades de dinero en el juego para obtener esas ventajas".