El hombre de 74 años afectado por la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo (FHCC) continúa ingresado este martes en la Unidad de Aislamiento de Alto Nivel de Hospital público La Paz-Carlos III y su situación sigue siendo estable, según han indicado fuentes sanitarias.
El hombre ingresó este lunes en la citada unidad tras haber sufrido una picadura de garrapata días atrás en el municipio de Buenasbodas (Toledo), donde pasaba unos días en su segunda residencia.
La Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha activado el protocolo necesario para atender a este paciente y evitar nuevos contagios de esta grave enfermedad. En este marco, fuentes sanitarias han apuntado a Europa Press que el seguimiento oportuno realizado a las personas que han sido contacto (familiar o profesional) del enfermo apunta que no se ha producido una transmisión antes del conocerse el diagnóstico.
Las muestras enviadas para estudio microbiológico al Centro Nacional de Microbiología confirmaron la infección por virus de la Fiebre Hemorrágica de Crimea-Congo (FHCC).
¿Qué es la fiebre hemorrágica de Crimea Congo?
La fiebre hemorrágica de Crimea-Congo es una enfermedad zoonótica endémica en las regiones de África, los Balcanes, Medio Oriente, el oeste y centrosur de Asia y suroeste de Europa.
En septiembre de 2016 se diagnosticó elprimer caso humano en la Comunidad, asociado al contacto con una garrapata en la provincia de Ávila, y un segundo caso en un profesional sanitario que le atendió. El caso detectado en Madrid fue el primero de Europa Occidental con carácter autóctono, no importado de otro ámbito geográfico.
Aunque se trata de un parásito fundamentalmente animal, la garrapata también actúa como vector en la transmisión de numerosas enfermedades humanas en todo el mundo. En España, con seis especies de garrapatas registradas por el Centro Europeo para el Control de Enfermedades, las enfermedades más importantes para la salud humana son principalmente bacterianas, como la enfermedad de Lyme, la fiebre botonosa, la anaplasmosis o la tularemia, y parasitarias, como la babesiosis.
A la lista hay que sumar enfermedades víricas, como la encefalitis y la fiebre hemorrágica provocada por el virus de la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, que tiene una mortalidad del 30% sin tratamiento. Desde 2013, se han registrado 13 casos en España, con cinco fallecimientos.
El último de ellos, el pasado 27 de abril, cuando la autoridad sanitaria de Castilla y León confirmó un caso de fiebre hemorrágica de Crimea-Congo (FHCC) producida por la picadura de una garrapata a un hombre de avanzada edad que estaba hospitalizado en Salamanca. El paciente estaba en una situación estable, dentro de la gravedad, en el Hospital de Salamanca y con las pertinentes medidas de aislamiento y protección para este tipo de situaciones, aunque finalmente falleció el 1 de mayo.
Síntomas ante la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo
El Sistema de Alerta Rápida en Salud Pública (SARSP) activó este mismo domingo la alerta por sospecha de Fiebre Hemorrágica de Crimea-Congo después de que el hombre mencionado anteriormente acudiera el viernes a Urgencias del Hospital Rey Juan Carlos (Móstoles) con un cuadro febril y malestar general. En general, según las autoridades, estos son los síntomas más comunes al contraer la enfermedad:
- Fiebre elevada.
- Cefalea.
- Malestar general.
- Dolores articulares y musculares.
- Sudoración.
- Síntomas gastrointestinales y/o respiratorios.
- Hipotensión.
- Bradicardia relativa.
- Taquipnea.
- Conjuntivitis.
- Faringitis.
- Enrojecimiento o erupción cutánea.
- Posible afectación hepática, renal o pulmonar.
Los pacientes que finalmente se recuperan comienzan con una mejoría al noveno o décimo día desde que apareciera la enfermedad.
¿Qué hacer ante la enfermedad? Recomendaciones de Sanidad
Desde Salud Pública se recomienda que, si se realizan actividades en la naturaleza, como senderismo o caza, se vista con ropa de colores claros, especialmente los calcetines, ya que será más fácil ver las garrapatas que se puedan adherir, así como ir provistos de prendas con mangas y pantalón largo.
También evitar el uso de sandalias, siendo más recomendable el uso de botas o calzado cerrado y con los calcetines por encima del pantalón. Emplee repelentes autorizados, y mantenga protegidos a los animales de compañía cuando salga al campo mediante repelentes externos.