Una atípica neumonía ha hecho saltar las alarmas en China, Europa y recientemente en Europa.
El denominado 'síndrome del pulmón blanco' ya ha alcanzado "niveles epidémicos" en Dinamarca, según han informado médicos locales, a quienes preocupa el aumento de casos por la resistencia de la bacteria que lo provoca a los antibióticos.
Qué es el síndrome del pulmón blanco
El síndrome del pulmón blanco o neumonía por mycoplasma es una neumonía provocada por la bacteria Mycoplasma pneumoniae. Se trata de una neumonía atípica ya que los síntomas asociados a esta enfermedad son diferentes de los de la neumonía causada por otras bacterias comunes y afecta mayoritariamente a niños.
En Ohio, Estados Unidos, se han registrado 150 casos de este síndrome en el último mes y en Países Bajos han informado que los casos en niños se han disparado. Las autoridades sanitarias ya están trabajando para mitigar la propagación de la enfermedad.
Síntomas y medidas de prevención
Los síntomas del 'síndrome del pulmón blanco' son los siguientes:
- Fiebre,
- Tos,
- Fatiga,
- Escalofríos,
- Flema y/o moco verde
- Y en casos graves, dificultad para respirar.
Como ocurre con el COVID, la neumonía 'pulmón blanco' se contagia al estar en contacto directo con los fluidos de una persona infectada (estornudos, saliva..), ya que la bacteria está en la nariz y en la boca.
Para evitar su propagación, los médicos aconsejan lavarse las manos frecuentemente, cubrirse la boca al toser y quedarse en casa mientras se está enfermo.
A qué se debe el aumento de casos
La principal investigadora del Statens Serum Institut (SSI), Hanne-Dorthe Emborg, ha explicado que el aumento de casos no es tan llamativo como pudiera parecer, ya que el los últimos años, y debido al protagonismo del Covid, "el número de infecciones de mycoplasma ha sido muy bajo".
"Por lo tanto, no es inusual que tengamos una epidemia ahora. De hecho, lo hemos estado esperando desde que cerramos el país después de la pandemia de Covid", ha asegurado.
Al haberse registrado un número tan bajo de casos en niños en los últimos tres años y medio, este grupo de población no han desarrollado inmunidad y por eso la incidencia esta temporada es mayor, según ha explicado la investigadora.
