En mieloma múltiple la ciencia ha avanzado mucho en los últimos años, pero el escollo de la curación se resiste como en ningún otro. De hecho cuando hablamos de este cáncer de sangre, su apellido suele ser incurable. El mieloma múltiple comienza en las células plasmáticas de la médula ósea, que proliferan de forma incontrolada produciendo anticuerpos defectuosos que invaden y destruyen el tejido óseo. Es el segundo cáncer hematológico más frecuente, que suma entre 2.000 y 3.000 pacientes cada año en España y representa entre el 1% y el 2% de todos los cánceres diagnosticados. Hay más de 15.000 pacientes en nuestro país con mieloma múltiple.
El estudio publicado por el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas y el grupo investigador de Joaquín Martínez, jefe de Hematología del Hospital 12 de Octubre y portavoz de la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH) abre una extraordinaria vía de tratamiento, al detectar que algunos de los pacientes en los que concurren una hepatitis B o C y un mieloma múltiple, se curan del cáncer o tienen una mayor supervivencia al tratar el virus. "En el estudio poblacional que hemos hecho tras ese primer caso detectado -explica el doctor Martínez- hemos visto que esa respuesta no ocurre en todos los casos, pero sí entre el 30% y el 40%".
Sugiere una infección vírica como una de las causas del mieloma múltiple
Al igual que hay pocas opciones de remisión en el mieloma múltiple, tampoco están muy determinadas sus causas, aunque desde hace tiempo se sospecha una relación con patógenos infecciosos. Sin embargo esa asociación no había podido comprobarse. La curación de un paciente con mieloma múltiple y hepatitis C tras haber sido tratado de esta enfermedad infecciosa, parece apoyar esta teoría.
El estudio, que ha merecido un editorial en la revista Haematologica, se apoya en que el organismo dejó de estar crónicamente expuesto al virus de la hepatitis porque el fármaco antiviral que recibió el paciente lo eliminó. Las células que fabrican anticuerpos contra la hepatitis C dejaron de reproducirse en exceso y el mieloma desapareció. Y esto ocurre "porque hay algunos pacientes en los que la inmunoglobulina que producen las células mielomatosas reconoce algunas de las proteínas del virus de la hepatitis B o C", detalla Joaquín Martínez.
Los resultados demuestran una mayor supervivencia
Los investigadores pasaron entonces a replicar el tratamiento con el 10% de los pacientes de mieloma infectados con hepatitis B (más de 1.300) o con hepatitis C (más de 1.200). El resultado es que entre quienes recibieron el tratamiento con antiviral, "la probabilidad de supervivencia fue significativamente mayor".
La importancia de este hallazgo radica, evidentemente, en la curación misma, pero también en la idea que apunta el editorial de Haematologica: "identificar precozmente una infección por el virus B o C en estos individuos puede conducir al tratamiento antiviral adecuado y la consiguiente mejora de los resultados".
El Mieloma Múltiple suele detectarse en personas de edad avanzada, con una edad media de diagnóstico entre los 65 y los 74 años, aunque en los últimos años se ha notado un aumento en la incidencia entre los pacientes más jóvenes con menos de 50 años. Solo el 5-10% de los pacientes con mieloma están por debajo de 40 años.