Es de cornamenta bizca (un cuerno hacia arriba y otro hacia abajo) y el año que viene será sacrificado. A Potxolo le alimentan cada día con 50 kilos de comida y su intención es que engorde 100 kilos más para poder venderlo con 2.100 kilos. Los chuletones que se saquen de él se van a vender a 100 euros el kilo.