JUICIO A RUBIALES

El abogado de Jenni Hermoso, en su alegato final: "No estamos ante un consentimiento, estamos ante un sometimiento"

En la lectura de su informe final, el abogado de Jenni Hermoso ha defendido que, por su superioridad jerárquica, Rubiales nunca debió besar a la jugadora, ni aunque le hubiera pedido su consentimiento.

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ondacero.es | EFE

Madrid |

La jugadora de la selección Jenni Hermoso, acompañada de su abogado Ángel Chavarría, en una imagen de archivo
La jugadora de la selección Jenni Hermoso, acompañada de su abogado Ángel Chavarría, en una imagen de archivo | Agencia EFE

El juicio a Luis Rubiales por un presunto delito de agresión sexual y coacciones a la jugadora Jenni Hermoso, ha entrado en su recta final.

Este jueves, la octava jornada del juicio en la Audiencia Nacional acogía los informes de dos acusaciones, la que ejerce el abogado de la jugadora Jenni Hermoso y la de las defensas del expresidente de la Federación Española de Fútbol y de los otros tres exdirectivos acusados.

En el turno del abogado de Jennifer Hermoso, Ángel Chavarría, éste ha defendido que el expresidente de la Federación de Fútbol Luis Rubiales jamás debió haber besado a la jugadora, ni siquiera aunque le hubiera pedido su consentimiento dada su superioridad jerárquica: "No estamos ante un consentimiento estamos ante un sometimiento".

"Nunca debió besarla por su superioridad jerárquica"

Durante la lectura de su informe definitivo, Chavarría ha afirmado que "no hay ninguna prueba que acredite" que Hermoso consintió el beso que le dio Rubiales "por su cuenta y riesgo, y de manera sorpresiva". El expresidente federativo -ha recalcado- "iba a consumarlo en cualquier caso", pues "no había posibilidad de escaparse", dado que le tenía sujeta la cabeza.

Aún así el abogado, que ejerce la acusación particular en este juicio, ha considerado que la petición del consentimiento a la que alude Rubiales y que el letrado ha negado que existiera, "ni siquiera debía haberse producido", dada "la diligencia debida" que debió haber tenido como presidente de la RFEF, según establece el protocolo frente a la violencia sexual aprobado por la Federación.

"Nunca debía haber pedido el consentimiento, ni pasársele por la cabeza" pedírselo "a una persona que jerárquicamente estaba por debajo y bajo sus instrucciones".

El abogado ha tratado de desacreditar la pericial de lectura de labios presentada por Rubiales que concluye que le preguntó si podía darle un besito. Un informe de cuya veracidad ha dudado el letrado, que además ha subrayado que "es público y notorio" que el expresidente federativo siempre se ha referido al beso como "piquito" y no como "besito".

El abogado ha leído además un fragmento de una sentencia del Tribunal Supremo, que estableció que "una mujer no puede tener una especie de sentido de servidumbre sexual de tener que soportar el deseo de un hombre de querer darle un beso en cualquier parte del cuerpo, ya que ello integraría una agresión sexual".

Para darse ese delito, ha enfatizado, no es necesario tener una intención lasciva, ni tampoco puede apelar Rubiales a la "tesis del error" porque "un error supone que no existe consentimiento".

También ha considerado acreditadas las coacciones a las que -subraya- sometieron a Jennifer Hermoso para que dijese que consintió el beso, pues "toda la estructura federativa estaba puesta en marcha" en las "reuniones de crisis" celebradas tras la final del Mundial de 2023 "para salvar al señor presidente".

Coacciones que extiende al resto de acusados: el exentrenador de la selección femenina Jorge Vilda, el exdirector de la masculina Albert Luque y el exjefe de marketing Rubén Rivera.