Así lo confesó a la emisora pública Radio de Suecia, Sara Danius, la secretaria permanente de esta institución que elige cada año al ganador del Nobel en esa categoría.
Los representantes de la Academia Sueca han hablado con el agente del músico y con otras personas de su entorno, pero no han podido hablar con Dylan, que tampoco ha hecho ninguna declaración pública ni ha hecho comentarios al respecto en los conciertos que ha dado en los últimos días.
Danius aseguró no estar preocupada a pesar de que todavía no se sabe si el músico aceptará el premio o acudirá a Estocolmo a recogerlo el próximo 10 de diciembre.
"Tengo un presentimiento de que Bob Dylan puede venir. Puedo equivocarme, y claro que sería una pena que no viniese, pero en cualquier caso la distinción es suya y no podemos responsabilizarnos de lo que pase ahora. Si no quiere venir, no vendrá, será una gran fiesta igual", afirmó Danius.
Solo dos personas han rechazado el Nobel de Literatura en más de un siglo de historia: el escritor ruso Boris Pasternak, en 1958, forzado por las autoridades soviéticas, aunque lo aceptó más tarde; y el francés Jean Paul Sartre, en 1964, por su política de rehusar cualquier tipo de distinción.
La Academia Sueca premió a Dylan por haber creado "nuevas expresiones poéticas dentro de la gran tradición de la canción estadounidense", según el fallo difundido el pasado jueves.
La sorpresiva elección supuso la primera vez que se distingue con el Nobel de Literatura a un cantautor.