Alex Batty desapareció cuando estaba de vacaciones con su madre y su abuelo y ha sido encontrado tras escaparse de una comunidad espiritual en los Pirineos franceses
El joven pasó estos seis años llevando una vida "itinerante" entre Marruecos, España y Francia, en grupos de "gran movilidad" que formaban una "comunidad espiritual", aunque no se pueden definir como "una secta", añadió.
A Francia llegó en el otoño de 2021, donde durante un periodo de tiempo vivió en una granja regentada por una pareja, que acogió al menor bajo su protección mientras su madre vivía en una comunidad espiritual. La pareja francesa ha explicado que se enteraron de su verdadera identidad y su dolorosa historia de secuestro a través de informes de noticias la semana pasada.
Así lo ha revelado esa pareja, Frederic Hambye e Ingrid Beauve, en una carta que recoge el diario británico Daily Mail.
Datos relevantes del caso
Antoine Leroy, fiscal adjunto de Toulouse, ha detallado que la madre se lo llevó a España después de que la justicia británica le diera la custodia a su abuela, que consideraba que su hija era inestable.
El joven estuvo seis años viviendo en casas grandes aisladas, equipadas con paneles solares y en las que habitaban varias familias.
Los habitantes de esas casas hacían mucha meditación y creían en la reencarnación y en la inexistencia del mundo real, añadió el fiscal adjunto.
Sin embargo, relató que Alex nunca estuvo encerrado o secuestrado, y que no sufrió malos tratos o violencia física.
Pasó cuatro días caminando por las noches y durmiendo de día
Alex Batty se fugó
Leroy explicó que su madre quería llevarle a Finlandia, por lo que Alex "comprendió que su periplo había terminado" y se fugó.
Pasó cuatro días caminando por las noches y durmiendo de día hasta que fue recogido el pasado miércoles en la carretera por un joven estudiante de 26 años que trabaja llevando pedidos de farmacias en las cercanías de Toulouse (sur).
Batty, que no sabe francés, le dijo en inglés que le buscaban las autoridades, por lo que el estudiante llamó a la policía para entregarlo.
Comprendió que su periplo había terminado
El estudiante que lo encontró, Fabien Accidini, ha explicado a algunos medios que encontró a un Alex hambriento y sediento que le contó en inglés su periplo, tras lo cual intentó contactar con las autoridades consulares británicas antes de recurrir a la policía.
Leroy detalló que Alex tiene "un buen estado de salud" y no ha denunciado haber sufrido violencia física. El fiscal adjunto describió al joven como alguien con una "inteligencia normal", pero que no estuvo escolarizado en estos últimos seis años y que no sabe francés.
Añadió que en Francia no habrá investigación judicial sobre el caso, puesto que ya hay abierta una en el Reino Unido.
Alex Batty habló en la noche del jueves con su abuela, Susan Caruana, quien declaró a medios británicos que está encantada de haber encontrado a su nieto.
El joven, su madre y su abuelo partieron de la zona de Manchester (norte de Inglaterra) el 30 de septiembre de 2017 hacia Marbella, y el niño fue visto por última vez en el Puerto de Málaga el 8 de octubre, cuando se esperaba su regreso.