Investigación de Save the Children

Aumentan las agresiones sexuales a niñas y adolescentes y las violaciones grupales

De las 18.731 denuncias por violencia sexual interpuestas en España en2022, un 40% tuvieron como víctima a niñas. Las agresiones sexuales múltiples han crecido un 64% en cinco años.

Belén Gómez del Pino

Madrid |

El perfil de la víctima de agresión sexual es una niña de 15 años agredida por un igual
El perfil de la víctima de agresión sexual es una niña de 15 años agredida por un igual | Zhivko Minkov//Unsplash

La crudeza de las cifras representa, fielmente, el drama que han vivido -y que siguen viviendo- miles de niñas y adolescentes en nuestro país. Y eso que los datos, recopilados por el Consejo General del Poder Judicial y por el Ministerio del Interior, es posible que se queden en la superficie. Según la última Macroencuesta de Violencia contra la mujer, sólo el 8% de las agresiones terminan convirtiéndose en denuncia. Esto en el caso de las adultas. En niñas y adolescentes, el problema se agranda.

Save the Children ha analizado en Silenciadas los últimos datos sobre violencia sexual en la adolescencia en España y las cifras estremecen: en 2022 se interpusieron en España 18.731 denuncias por violencia sexual. Casi la mitad (45%) tenían como víctima a una persona menor de 18 años. De estas denuncias, el 82% eran niñas o adolescentes.

Además, se ha disparado en cinco años el número de agresiones sexuales múltiples, cometidas por más de una persona (un 64%). Ciñéndose a la infancia y adolescencia, el perfil de la víctima es el de una niña de edad media de 15 años cuyos agresores tienen una edad similar, se conocen con anterioridad y el delito suele cometerse con penetración y violencia. Recuerda Save the Children que en la violencia sexual entre iguales, el hogar es el escenario más frecuente y que el ocio nocturno también tiene una gran relevancia en esta violencia.

El impacto de la pornografía

A la hora de rastrear por las causas de este incremento, enseguida surgen dos palabras: tecnología y pornografía. La primera como el entorno en el que ya se desarrolla la infancia y la adolescencia. La segunda "porque condiciona -explica la ONG- la forma en que los niños, niñas y adolescentes se relacionan entre sí".

Según datos de la propia organización, casi 7 de cada 10 adolescentes consumen pornografía y acceden a contenidos sexuales ya a los 12 años. "Pornografía de consumo masivo, online, gratuita e ilimitada, con contenidos basados en la violencia y la desigualdad", puntualizan. La pornografía muestra comportamientos reproducidos por los menores: la no necesidad de pedir consentimiento, la negativa del mismo por parte de los hombres, la ausencia de métodos anticonceptivos, la cosificación de la mujer o el establecimiento de roles desiguales: dominio masculino y sumisión femenina.

El 10% de las agresiones son grabadas y difundidas

"Tenemos que tener en cuenta -añade Catalina Perazzo, directora de Incidencia Política y Social de Save the Children- que más de un 10% de las agresiones sexuales múltiples son grabadas o fotografiadas como señal de dominio y a la espera de un reconocimiento del grupo de iguales", lo que da muestra del impacto tanto de la pornografía como de las redes sociales.

En 2022, 1.031 menores de entre 14 y 17 años fueron detenidos o investigados por delitos sexuales, un 18 % más que en 2021; adolescentes responsables del 10,6 % de las violaciones (292 casos), del 8,9 % de abusos y agresiones sexuales (638) y del 10,7% de los delitos de pornografía de menores (50).

Utilizar la pornografía como educación sexual es como usar un videojuego de carreras para aprender a conducir

Por todo ello Save the Children pone el foco en implantar una educación afectivo-sexual desde edades tempranas. "La pornografía -se queja Perazzo- no puede ser la profesora de sexualidad de los niños, porque estamos hablando de ficción, no es real. Es como si enseñáramos a conducir a adolescentes con videojuegos de carreras de coches".

Apuesta la ONG por dotar a los menores de herramientas para que puedan hacer un uso seguro de Internet y las redes sociales. "Y cuando la violencia se ha producido -añade- es necesario que quienes han sido víctimas sean atendidos con las mayores garantías y respetando todos sus derechos". Sin olvidar tampoco la atención a los adolescentes que han cometido una agresión. Save the Children apuesta por intervenir, no sólo de forma individualizada con el agresor, sino también con su entorno, para una reparación eficaz y a largo plazo.