El trágico fallecimiento de dos niños por ahogamiento en las provincias de Murcia y Sevilla en las últimas 24 horas pone en evidencia, de nuevo, los preocupantes datos de ahogamientos que se están registrando en nuestro país durante este 2023. Hace unos días, la Real Federación de Socorrismo publicó su Informe Nacional de Ahogamientos (INA), que elevaba la cifra de fallecidos entre el 1 de enero y el 31 de julio hasta los 249, siendo esta cifra la más alta de los últimos cinco años. El pasado mes de junio, tal y como indica el informe, resultó especialmente crítico, pues durante este periodo murieron 79 personas en el agua.
Dos fallecimientos de niños pequeños
Una celebración familiar en una vivienda situada en la localidad sevillana de La Campana terminó en tragedia después de que un niño de apenas dos años cayese a la piscina de la finca. A pesar de que que se desplazaron hasta el lugar tanto dotaciones médicas como de la Guardia Civil, e incluso helicópteros, las autoridades no pudieron hacer nada por salvar la vida del pequeño. Manuel Fernández Oviedo, alcalde del pueblo, ha expresado su apoyo a la familia, y ha afirmado que el municipio se encuentra "consternado por este triste acontecimiento". Se ha decretado un luto oficial de 3 días después de lo sucedido, durante el cual quedan anuladas la mayor parte de las actividades y espectáculos de carácter municipal.
También ayer perdía la vida una niña de 3 años, esta vez en una piscina de la urbanización Collados Beach, próxima a la Manga del Mar Menor, en Murcia. La niña fue rescatada de la piscina del complejo, en estado de semiinconsciencia, por los socorristas, que practicaron, sin éxito, un tratamiento de oxigenoterapia para salvar a la pequeña.
Estas dos víctimas se unen a los otras 17 personas menores de edad que han perdido la vida en el agua durante este 2023: el propio estudio publicado por la Federación de Socorrismo hace hincapié en la importancia de vigilar a los menores siempre que se encuentren en el agua o cerca de ella, y recomienda también que los niños que no sepan nadar utilicen chalecos salvavidas para reducir el riesgo de ahogamiento; un niño puede ahogarse en pocos minutos, cuando la profundidad es de 30 o más centímetros.
"Siendo conscientes de la preocupante situación de ahogamientos y lesiones en espacios acuáticos, buscamos concienciar sobre la importancia de adoptar comportamientos responsables en el agua y así, juntos, garantizar momentos inolvidables sin riesgos", explica Sergio Gil el director de la Unidad de Defensa, Seguridad y Emergencias de UNIVERSAE, el Instituto Superior de Formación Profesional de la Unidad de Defensa, Seguridad y Emergencias.
Consejos para evitar disgustos
Desde UNIVERSAE también recomienda a los bañistas que se informen acerca de las condiciones de corrientes y profundidad cuando opten por bañarse en espacios naturales - como lagos y playas-, y que escojan siempre zonas vigiladas por socorristas: la playa parece ser el espacio que más peligro entraña, pues la mitad de los ahogamientos registrados -133 de 249- se han dado en el mar.
Obedecer a estos trabajadores y respetar las banderas es clave para evitar accidentes, junto con la prevención, tal y como ha indicado Gil. Siempre que se de una situación de emergencia, se debe actuar con calma y avisar a los socorristas.
Desde UNIVERSAE desaconsejan también lanzarse de cabeza al agua, tomar baños después de consumir alcohol y entrar al agua cuando ya se ha puesto el sol. Andalucía (38 ahogados) es la comunidad donde más fallecimientos se han registrado, según el INA, seguida de Cataluña (37), Comunidad Valenciana (33) y las Islas Canarias (31)