El detenido permanece en dependencias de la comandancia de la Guardia Civil de Huelva y aunque tras ser detenido ayer negó su implicación en los hechos, Bernardo Montoya ha confesado el crimen.
Al parecer, habría tendido una trampa a Laura cuando ella le preguntó donde había un supermercado y Montoya pudo ver allí una oportunidad para cometer el crimen. Aún no hay confirmación sobre si hubo o no agresión sexual, aunque sí hay indicios de ello. También ha dicho a los agentes que no la mantuvo retenida varios días. Posiblemente trasladarán al asesino confeso al lugar del crimen para hacer allí una reconstrucción de los hechos.
Según la autopsia practicada al cuerpo de Laura Luelmo, la joven maestra de 26 años natural de Zamora, apunta a que la causa de la muerte fue un traumatismo craneoencefálico provocado por un fuerte golpe en la cabeza. Según fuentes de la investigación, el fallecimiento se produjo entre el 14 y el 15 de diciembre.