Según han informado fuentes municipales, el SPEIS recibió el aviso y hasta el lugar se desplazó la dotación de rescate acuático junto con seis bomberos. Los bomberos se dividieron en dos equipos: dos de la unidad de buceo iniciaron las tareas de rescate del galgo desde el agua para salvarlo, ya que estaba atrapado entre las cañas y era incapaz de salir por sus propios medios, y el otro grupo, con cuatro agentes, en el exterior asegurando el rescate.
Según el SPEIS, el perro se había quedado atrapado y llevaba más de tres horas en el agua intentando salir. Los dueños manifestaron que cayó a la balsa cuando iba persiguiendo a un conejo, y que al comprobar que era imposible sacarlo alertaron a los bomberos para poder rescatarlo.