La incidencia ha motivado el despliegue de efectivos de los bomberos y de la Policía Local, toda vez que el Ayuntamiento hispalense acomete actualmente la tala de unos 500 árboles declarados en situación de riesgo cuatro para las personas y considerados "irrecuperables" a cuenta de su deterioro.
La medida, que ha despertado fuertes críticas y todo un debate sobre el estado y tratamiento del arbolado de la ciudad, deriva de un informe de 2015 que detectaba unos 2.500 árboles en dicha situación, toda vez que los ecologistas y la oposición insisten en que muchos de estos árboles podrían ser salvados aún.