Como cada año, miles de conductores deben pasar la ITV de sus vehículos, un proceso que comprueba si estos se encuentran en condiciones de circular. En España, hay una situación de dejadez con la ITV hasta el punto de que durante el año pasado, un 34% de los coches que debería haberla pasado, no lo hizo.
Desde el año 2017, este dato crece casi un 1% al año, una cifra preocupante, ya que la seguridad en la carretera está en juego, y cuantos más coches circulen con la ITV en regla, mayor será esa protección. Casi el 10% de todos los automóviles en España no tienen la ITV en vigor, y son más de tres millones los que circulan sin la ITV en regla. La DGT ya ha advertido de las posibles multas que esto puede suponer a los conductores.
Cambios en la ITV
El Gobierno Europeo ha recibido numerosas solicitudes para abordar este problema en los últimos años. El sector de las ITV ha solicitado al nuevo Gobierno implementar cambios rápidamente para reducir estos porcentajes y mejorar la seguridad vial.
A partir del 6 de julio de 2024, los nuevos requisitos que afectarán a los vehículos nuevos, la gran mayoría de ellos matriculados a partir de 2022. Todo vehículo nuevo deberá contar con diez sistemas de ayuda al conductor para aprobar la ITV:
- Asistente de velocidad inteligente
- Cámara trasera con detección de tráfico cruzado
- Alerta de cambio involuntario de carril
- Alcoholímetro anti-arranque
- Advertencia de somnolencia y pérdida de atención
- Frenado de emergencia con protección especial a usuarios vulnerables de la vía pública
- Registrador de datos
- Alerta de cinturón en las plazas traseras
- Control de crucero adaptativo
- Sistema de control de presión de neumáticos
La nueva legislación europea que acaba de entrar en vigor exige que los vehículos nuevos cuenten con todos estos sistemas de seguridad y ayuda al conductor para reducir la probabilidad de accidente y mejorar la seguridad en carretera.
Con estas medidas, el Parlamento Europeo estima en un informe que, de aquí a 18 años se pueden evitar hasta 25.000 muertes y 140.000 heridos graves.
Responsabilidad de los fabricantes
La normativa implica que los fabricantes de vehículos deben asegurar que todos los sistemas de ayuda estén operativos y proporcionar la información necesaria para su comprobación durante la ITV. Esta responsabilidad adicional requiere que los fabricantes garanticen la fiabilidad y funcionalidad de estos sistemas antes de que los vehículos sean inspeccionados.
Además, las estaciones de ITV tendrán que adaptarse para poder inspeccionar adecuadamente estos nuevos sistemas tecnológicos. Este cambio supone un reto logístico y técnico para las estaciones, que deberán actualizar sus procedimientos y equipamientos para cumplir con los nuevos estándares.
La normativa exige también que los fabricantes faciliten el acceso a la comprobación de estos sistemas. Por lo que, si tienes un coche de reciente fabricación, es importante que te asegures de que tiene equipados y en buenas condiciones estos diez sistemas de seguridad.
