Cáncer de mama: El diagnóstico precoz y la investigación son clave para la supervivencia

Hoy es el día de la lucha contra el cáncer de mama, el tumor más frecuente entre las mujeres: Se calcula que una de cada ocho mujeres presentará esta enfermedad a lo largo de su vida.

En España, uno de cada tres tumores diagnosticados en mujeres tiene origen en la mama y el cálculo es que en este 2020 se incorporen a la estadística unas 33.000 pacientes. Este cáncer suele aparecer entre los 45 y los 65 años, momento en el que se producen los cambios hormonales asociados a la menopausia. Sin embargo, como todos los tumores, está asociado al envejecimiento, con lo que la curva de incidencia continúa aumentando hasta los 80 años. También hay un 10% de casos de cáncer de mama que se producen en menores de 40 años.

No hay causas asociadas a la aparición de los tumores, pero como en otros, los hábitos poco saludables como sedentarismo, obesidad, mala alimentación, exposición a contaminación, consumo de alcohol o de tabaco, incrementan el riesgo de padecerlo. Además hay un porcentaje de tumores, entre un 5 y un 10% que son hereditarios, tienen su origen en una mutación genética.

No obstante, no todo son malas noticias. Un diagnóstico precoz y la investigación son clave para la supervivencia, la cual aumenta un 1,4% cada año. En estos momento nueve de cada diez mujeres diagnosticadas en nuestro país de cáncer de mama sobreviven a los 5 años, un dato que alienta a las pacientes.

Durante este año el impacto de la crisis sanitaria por el coronavirus ha retrasado tanto los diagnósticos, como los tratamientos y la investigación. Los oncólogos están viendo menos pacientes en primera visita, están tratando mujeres con una evolución tumoral mucho mayor de la que debía y en algunos casos, las normas de seguridad han forzado el aplazamiento de algunos tratamientos de cirugía, quimioterapia y radiología. Tampoco se han abierto ensayos clínicos con nuevos fármacos que podrían haber beneficiado a muchas pacientes.

Sin embargo, la investigación no se ha frenado. En 2020 se han producido importantes avances. Un grupo español liderado por el oncólogo Javier Cortés, director del Instituto del Cáncer de Mama del Hospital Tecnon de Barcelona y Ruber de Madrid, ha presentado en ASCO, el Congreso Americano de Oncología, el foro internacional más prestigioso en cáncer, un estudio que demuestra que en pacientes con un tipo de tumor agresivo no hará falta tratamiento de quimioterapia, lo que elimina efectos secundarios.

Además se han ofrecido los primeros datos sobre pacientes con el cáncer de mama más agresivo, el triple negativo (los tumores que no tienen ni receptores hormonales de estrógeno o progesterona y tampoco producen exceso de la proteína HER2, las tres dianas contra el cáncer de mama). Estos tumores representan entre el 10 y el 15% de los casos y casi toda la mortalidad. Tienen pocas posibilidades de tratamiento, pero ahora se trabaja con un anticuerpo que ya se había probado en otros tumores. Actúa como un caballo de Troya, se disfraza de grasa para llegar hasta la célula sin ser detectado como extraño y una vez dentro de la célula tumoral, libera la quimioterapia. Resulta mucho más eficaz y menos lesivo para la paciente.

En este tipo de tumor, en 2020 también se han publicado avances en inmunoterapia. Estudios sobre tumores metastásicos y la fórmula inmunoterapia más quimioterapia para eliminar el tumor antes de la cirugía. Dos estudios presentados en el congreso de ASCO y en el de la Asociación Europea de Oncología (ESMO), celebrados de forma virtual en junio y septiembre.​

¿Cuáles pueden ser sus síntomas?

Por lo general, durante las fases tempranas del cáncer de mama no se suelen producir síntomas llamativos que hagan sospechar que se está empezando a padecer esta enfermedad.

Por ello, para detectarlo, en necesario realizar alguna prueba o test específico que en una primera fase pasa por la realización de una mamografía.

Las causas del cáncer de mama no son las mismas para todos los casos, pero sí se sabe que este cáncer ocurre cuando algunas células mamarias comienzan a crecer de manera anormal.

Algunos de los síntomas para tener en cuenta para una detección precoz pueden se los siguientes:

• Cambio de tamaño, forma o aspecto de una mama o el pezón.
• Un bulto o engrosamiento en las mamas o en las axilas.
• Cambios en la piel que se encuentra sobre la mama, como formación de hoyuelos.
• Dolor en el pecho al palparse durante el autoexamen mamario.
• Pérdida leve de movilidad en las mamas al levantar los brazos.
• Alteración en la piel de la mama: Descamación, desprendimiento de la piel, formación de costras y pelado del área pigmentada de la piel que rodea el pezón (areola) o la piel de la mama, enrojecimiento o pequeños orificios en la piel que se encuentra sobre tu mama, como la piel de una naranja.

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