Por primera vez en España se ha conseguido con éxito llevar a cabo un trasplante de corazón infantil sin necesidad de que donante y receptor tengan el mismo grupo sanguíneo. Se trata de una técnica casi milagrosa que en Europa sólo se aplica en otros dos países y que permite evitar el rechazo del órgano.
La protagonista se llama Carla, tiene cinco meses y se recupera casi a punto de pasar a planta en la UVI pediátrica del Hospital Gregorio Marañón. Nació sin ventrículo izquierdo en el corazón y casi sin opciones más allá de un trasplante muy complicado por la escasez de donantes.
Pero llegó uno y gracias al hallazgo de que hasta los 15 meses, los bebés no generan los anticuerpos que provocan el rechazo, Carla está viva y no necesitará inmunosupresores.
Según explica la jefa de la Unidad de Trasplante Infantil del Gregorio Marañón, Manuela Camino, el grupo sanguíneo de Carla ha cambiado de A a AB, como el que tenía su donante. "Los anticuerpos que rechazan el grupo sanguíneo no los produce y esa es la genialidad, que el niño ha adoptado el grupo del donante como si fuese suyo".
España es el tercer país europeo en aplicar esta técnica que podría aumentar en un 50% el número de trasplantes de corazón en bebés de menos de un año, reduciendo así la mortalidad en lista de espera.