Los arrestados compartían archivos con material pornográfico infantil a través de redes Peer to Peer, uno de los sistemas más utilizados para intercambiar este tipo de contenido delictivo, según informan fuente policiales.
La operación se inició en abril del año pasado cuando los agentes detectaron que, a través de las redes, de intercambio de archivos Peer to Peer se estaba compartiendo material que contenía pornografía infantil.
Tras varias pesquisas los policías identificaron a doce usuarios, cuyos domicilios se encontraban en distintos puntos de Castilla y León, que consumían y distribuían material de explotación sexual de menores, cinco de los cuales han sido detenidos, (dos en Valladolid, dos en Ponferrada y uno en Burgos).
Se han practicado once registros domiciliarios que permitieron la incautación de gran cantidad de material informático y miles de archivos con contenido sexual explícito entre menores.
Aunque la mayoría del material incautado es ya conocido de los investigadores, se continúa trabajando en la tarea de identificar y localizar a todas las víctimas de los miles de archivos pedófilos encontrados en los dispositivos informáticos de los detenidos.
Han sido intervenidos siete ordenadores portátiles, doce discos duros, tres cámaras espía y una tablet.