Desde la pandemia originada en 2020, la confusión de la covid-19 con otras enfermedades reparatorias como la gripe suele ser común. A raíz de esto, la web de Mayo Clinic elaboró un artículo donde comparaba a todos los virus respiratorios similares.
En los meses de otoño e invierno suele crecer la incidencia de ambas infecciones en nuestro país, y desde que no se realizan test diagnósticos es más complicado saber que tipo de virus padecemos.
¿Qué son estas enfermedades?
Tanto la COVID-19 (SARS-CoV-2) y la gripe (influenza) son dos enfermedades respiratorias que están causadas por el contagio de un virus. Se diferencian entre sí por el virus que lo provocan y son propagados por causas similares.
Síntomas
Los síntomas que estas dos enfermedades tienen son muy parecidos y hasta pueden ser asintomáticas. Esto supone una de las causas que hace que la gente se confunda. Pero, ¿cómo se pueden diferenciar?
Si comparamos los síntomas podemos ver que los dos pueden producir dolor de cabeza, tos, dolor muscular, cansancio, dolor de garganta goteo de la nariz o congestión nasal, fiebre, náuseas o vómitos, diarrea, o falta de aire y dificultad para respirar. El único en el que difieren es la pérdida del sentido del gusto o del olfato tan conocido por el covid persistente.
Las únicas diferencias que se podrían encontrar son, en primer lugar, la aparición de los síntomas. Mientras los síntomas de la covid-19 aparece, normalmente, de 2 a 14 días después de la exposición, la gripe se manifiesta entre 1 y 4 días después de contraer el virus. Además, los síntomas más graves pueden variar debido a que la covid suele derivar en estos niveles con coágulos de sangre, afecciones posteriores a la enfermedad y una inflamación multisistémico.
Por último, solo habría un tratamiento antiviral para este coronavirus frente a los varios tratamientos y dosis para la gripe que se pueden introducir en el cuerpo a lo largo de los años (la vacuna es anual).
Forma de contagio
Las formas de contagio también son similares. La infección producida por la covid-19 y la gripe serían trasmitidas a través de pequeñas gotitas respiratorias que se liberan cuando alguien tose, estornuda, respira o habla. Por ello, si nos encontramos con una distancia estrecha respecto a una persona infectada, se podrían inhalar estas gotitas y contagiarse.
Por otro lado, una persona puede también infectarse si toca una superficie donde esté este virus y luego lo hace con la boca, nariz u ojos que suponen una vía de acceso para el contagio. Sin embargo, el riesgo de ocurrir esto es bajo.
Cómo prevenirlas
Para la prevención del contagio por este virus, el remedio más enfatizado es la de la vacunación que reduce considerablemente el riesgo. Además, puede administrarse la dosis por vía respiratoria a diferencia de la inyección tradicional. También, una de las medidas más efectivas y que se ha normalizado su uso son las mascarillas. Otras precauciones típicas:
- Evitar el contacto cercano con una persona contagiada o con síntomas.
- Distanciamiento en espacios públicos cerrados.
- Uso de mascarilla en espacios públicos cerrados (aunque ya no es obligatoria salvo en centros de salud, farmacias y residencias).
- Lavarse las manos a menudo de forma correcta o usar desinfectante con, al menos, un 60% de alcohol.
- Mejorar la ventilación de espacios cerrados.
- Evitar tocarse los ojos, la nariz y boca.
- Taparse la boca y nariz al toser o estornudar y tirar a la basura el pañuelo usado. Por consiguiente, después de esto habría que lavarse las manos.
- No compartir utensilios de uso personal como platos, vasos, tallas, cepillo de dientes, etc.
- Limpiar y desinfectar las superficies. Algunas de las más frecuentadas pueden ser las manijas de las puertas, los interruptores de la luz, los dispositivos electrónicos, encimeras o mesas, entre otros.
