Según ha informado hoy la Aecosan en su web, la toxina botulínica estaba presente en una de las latas de conservas que entregaron a las autoridades sanitarias para su análisis los dos bomberos afectados por botulismo.
Tras conocerse estos dos casos, el pasado día 30 de junio la Agencia de Salud Pública de Cataluña ordenó retirar de la venta, por precaución, varios lotes de judías blancas cocidas y bacalao desmigado y desalado que se venden en supermercados de toda España.
El botulismo es una intoxicación causada por la toxina botulínica, una neurotoxina bacteriana producida por la bacteria Clostridium botulinum, y la vía de intoxicación más común es la alimentaria, ya sea por ingestión de alimentos mal preparados o conservados de manera inapropiada.
Tradicionalmente, los brotes de botulismo, uno de los tóxicos naturales más potentes, se han asociado al consumo de conservas caseras.