Este 12 de octubre se celebra en España el Día de la Hispanidad, fecha en la que se conmemora la llegada de Cristóbal Colón a América en 1492. Gracias a este logro, el Descubridor es mundialmente conocido, aunque muchas de las terorías que sobre él circulan son falsas o poco fundadas. Por ello, en Ondacero.es hablamos con su descendiente directa e historiadora, Anunciada Colón de Carvajal, para esclarecer algunos de los datos sobre uno de los personajes más relevantes de la Historia.
Colón sabía que había llegado a un nuevo continente
Aunque es cierto que Cristóbal Colón quería llegar a las Indias navegando por occidente y, en un principio, él pensaba que lo había logrado, en sus próximos viajes descubrió que no había conseguido llegar a su destino. El segundo viaje Colón lo dedicó a explorar las Antillas con la intención de identificar la localización exacta en la que se encontraba lo que él creía que era el continente asiático; y en el tercer viaje, el Almirante descubrió que no estaba en las Indias, sino que se había adentrado en un continente nuevo.
En este viaje al Nuevo Mundo, Cristóbal Colón había determinado una ruta diferente, más cercana al ecuador, donde entró en contacto, por primera vez, con América del Sur. Cuando el Almirante navegaba cerca la isla Trinidad, vio la desembocadura del Orinoco, un río de tal dimensión que le hizo darse cuenta de que no estaban en el continente asiático. Fue entonces cuando Colón empezó a creer que se encontraban en un nuevo continente situado justo debajo de Asia. De hecho, el propio Almirante dijo:
Yo estoy creído que esta es tierra firme, grandísima, de que hasta hoy no se ha sabido, y la razón me ayuda grandemente por esto deste tan gran río y desta mar...
Tras este hallazgo, Cristóbal Colón realizó el cuarto viaje con el objetivo de encontrar un paso entre la masa continental austral y la tierra firme de Asia, como ruta hacia las islas de la especiería:
"Pues la intención del Almirante cuando iba por el Océano era ir a reconocer la tierra de Paria y continuar por la costa, hasta dar con el estrecho… siguió su intento de descubrir el estrecho de Tierra Firme, para abrir la navegación del mar de Mediodía, de lo que tenía necesidad para descubrir las tierras de la especiería …".
Por otro lado, Américo Vespuccio, amigo de Colón y miembro de su tripulación en el segundo viaje, corroboró, años después, esta interpretación original del Almirante de la geografía americana, con la certeza de sus propias exploraciones posteriores, que le llevarán por la costa atlántica del continente, probablemente hasta el sur de la desembocadura del Río de la Plata, y con ello, el Nuevo Mundo pasaría a llamarse América.
Colón descubrió el cambio en la declinación magnética
Según explica Anunciada Colón de Carvajal, Cristóbal Colón también fue capaz de emplear correctamente el cambio en la declinación magnética de la brújula. La "aguja de marear" o brújula era, y sigue siendo, el instrumento básico, continuamente observada para mantener el rumbo deseado, de manera que se alojaba en una caja de madera o bitácora, iluminada por la "lantía" o candil de aceite durante la noche. La aguja imantada se hallaba fijada sobre una madera torneada, a la que se había fijado una rosa de los vientos con 32 direcciones.
El hito que el Almirante hizo, fue identificar la necesidad de magnetizar la brújula periódicamente. El 13 de septiembre de 1492, Colón apuntó en su Diario, que llegado a una situación dada, (meridiano 3º 33' de la isla de Corvo, de las Azores), la aguja sufría una variación: "En este día, al comienzo de la noche, las agujas nordesteaban; y a la mañana, noruesteaban algún tanto".
¿Cómo se corregía la declinación magnética?
Para corregir la declinación magnética (la diferencia entre el polo magnético y el polo real), se colocaba la rosa de los vientos desviada con respecto al eje de la brújula, haciendo coincidir la flor de lis con el Norte geográfico. En una carta a los Reyes, Colón reconoció haber "cebado" la brújula en sus navegaciones anteriores por el Mediterráneo, lo cual demuestra que conocía la declinación con anterioridad a su primera travesía por el Atlántico. El descubrimiento de Colón con respecto a la declinación magnética fue la variación según la latitud, de manera que se hacía necesario "cebar" de distinta manera la aguja, dependiendo de la zona del globo por la que se navegara.
La esclavitud en época de Colón y naturaleza de los indios
Anunciada Colón de Carvajal asegura que no se puede juzgar el pasado con los ojos del presente, y expone que "cualquier consideración sobre la naturaleza jurídica de los pobladores americanos a partir del viaje de Colón de 1492 debe basarse en los criterios y normas vigentes en aquel momento". Además, matiza que "los territorios del Nuevo Mundo mantuvieron su Derecho indígena propio, siempre que no fuera contrario a la legislación de los Reyes españoles ni a las creencias de su religión".
La esclavitud era común según la ley de la guerra
La historiadora asegura que "a finales del siglo XVI tanto en España como en otros países de Europa la esclavitud era común según la ley de la guerra, es decir, en los casos de haber sido hechos prisioneros en lo que se denominaba 'guerra justa'". Por ello, alega que "ampliando el contexto al nivel personal de Colón, recordemos que había presenciado cómo esta era una práctica usual de los portugueses en sus factorías de la costa de Guinea".
Aún así, cuando en 1495 Colón envió a la Península cierto número de indios como esclavos, se produjo el inicio de una transcendental reflexión por parte de Isabel La Católica, que tuvo como resultado un cambio radical en la consideración jurídica de los indios como personas libres, vasallos y, por lo tanto, no sujetos a esclavitud. Y así lo dejó plasmado la Reina Isabel en las instrucciones de gobernación que firmó en el año 1500.
¿Murió pobre Cristóbal Colón?
La Historia ha resaltado frecuentemente las extraordinaria importancia de los cargos que los Reyes Católicos otorgaron a Colón en las 'Capitulaciones de Santa Fe', así como la magnitud de la remuneración económica: de la décima parte del comercio procedente de las tierras que descubriese. Sin embargo, pocos se han detenido a verificar si aquellas promesas fueron cumplidas y en qué proporción, confirma la descendiente del Almirante.
En 1503, desde Jamaica, Cristóbal Colón escribió a los Reyes con respecto a su pobreza:
"…al cabo de 20 años que he servido con tantos trabajos y peligros, hoy día en Castilla no tengo una teja; y si quiero comer o dormir no tengo adonde salvo al mesón o en taberna y lo más de las veces falta para pagar el escote …".
Hasta hoy no he recibido ninguna cosa de renta ni provecho
Además, en 1501, dos años antes, el Descubridor afirmó también a los Reyes Católicos que "hasta hoy no he recibido ninguna cosa de renta ni provecho". Los monarcas, comenta Anunciada Colón de Carvajal, "sí tendrían una idea aproximada de la situación económica de Colón, como lo habían demostrado el año previo, 1500, cuando nada más llegar a España le convocaron en Granada, enviándole dinero para su ayuda". Por otro lado, la historiadora señala que "también hay otro dato importante que aclara la cuestión: en el momento de organizarse el tercer viaje (1498), el balance de la empresa de Indias era totalmente negativo, hasta el punto de que Colón acordó con los Reyes no cobrar la décima ni la "ochava", así como tampoco correr con la partida de los gastos acumulados".
Asimismo, el 19 de mayo de 1506, en la víspera de la muerte de Cristóbal Colón, en el trance de disponer el reparto de sus bienes, manifestaba que "hasta ahora no se ha sabido renta de las dichas Indias, para que yo pueda repartir…". Aunque un testamento es un documento privado, realizado en un momento transcendental de la vida que "no se presta a motivaciones de propaganda o de falta de honestidad", sostiene Colón de Carvajal. Todos estos datos parecen confirmar la teoría de que Cristóbal Colón no murió rico y, a pesar de "los años de discusión de sus dos inmediatos sucesores, el resultado final del su gran servicio, el descubrimiento de un Nuevo Mundo, fue una renta similar al sueldo de los virreyes", alega su descendiente.