Un año más la gripe vuelve a ser protagonista del invierno. En las últimas semanas han aumentado los casos y, aunque la campaña de vacunación contra la gripe sigue a pleno rendimiento, muchas personas se están contagiando.
Con la gripe llega el malestar general, la fiebre, el dolor de garganta, el cansancio...
La fiebre es un síntoma común y característico de la gripe. Suele ser fiebre alta, con temperaturas entre los 39 y 40° C. Es importante monitorizar periódicamente la fiebre para vigilar que no suba más de lo debido.
La gripe y la fiebre sí pueden ser de gravedad en niños pequeños, ancianos y personas con enfermedades crónicas. En ellos debemos estar muy atentos a los síntomas que nos indican mayor riesgo, pues pueden requerir un tratamiento adaptado e, incluso, hospitalización.
Síntomas que alertan para acudir al médico
- Temperatura 38 °C o más
- Tos con mucosidad y sangre
- Falta de aire o dificultad para respirar
- Síntomas que duran más de 3 semanas
- Vómitos o diarreas persistentes.
Los síntomas en niños para acudir al médico
Además de los anteriores otros síntomas de alarma son:
- Convulsiones.
- Aletargamiento y dificultades para mantenerse despierto.
Medicamentos efectivos contra la gripe
Aunque no hay ningún medicamento que cure como tal la gripe sí existen principios activos que ayudan a paliar los síntomas. Estos son los más eficaces, según recoge la OCU:
- Analgésicos: estos fármacos son efectivos para bajar la fiebre y aliviar el dolor muscular. El paracetamol, la aspirina o el ibuprofeno son algunos de ellos.
- Remedios caseros: beber abundantes líquidos ya que en caso de tener fiebre nos ayudará a mantenernos hidratados y ayuda a fluidificar las flemas y la mucosidad de las vías respiratorias.