Algunas comunidades autónomas están instando al Ministerio de Sanidad a administrar una cuarta dosis de la vacuna contra el Covid-19 debido al repunte de casos que está habiendo en determinados segmentos de la población. El departamento dirigido por Carolina Darias valora su administración en la población general, pero empezando por aquellos colectivos más vulnerables.
A su vez, cada vez son más los expertos que estudian si sería necesario o no suministrarla en todos los grupos poblacionales en lugar de en los más delicados, debido a la cercanía de la inoculación de la tercera dosis.
¿Quién debe ponerse la cuarta dosis?
Tanto el Ministerio de Sanidad como otros organismos oficiales coinciden en que la cuarta dosis o segunda dosis de refuerzo debe suministrarse a los mayores de 80 años, debido al repunte de casos que se están observando no sólo en nuestro país sino en otros, entre las personas más mayores.
Según explicó Carolina Darias el pasado mes de abril en una entrevista, la cuarta dosis ya se había empezado a poner en personas inmunocomprometidas, las incluidas en el llamado 'Grupo 7' -condiciones de muy alto riesgo-:
- Trasplantados.
- Pacientes oncológicos.
- Pacientes en hemodiálisis.
- Infección con VIH.
- Inmunodeprimidos.
- Pacientes con inmunodeficiencia primaria.
- Pacientes con Síndrome de Down mayores de 40 años.
¿Es necesaria la cuarta dosis?
Por su parte, la Estrategia de Amenazas Sanitarias Biológicas y Vacunas de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés), ha anunciado la conveniencia de la aprobación de un segundo refuerzo de la vacuna contra la Covid-19 en este grupo poblacional de más de 80 años, aunque ha reconocido que aún es "demasiado pronto" para considerar el uso de esta cuarta dosis en la población general.
Otros expertos han valorado la necesidad de esta nueva dosis de refuerzo. Es el caso de Katelyn Jetelina, epidemióloga y profesora de la Universidad de Texas, que en un artículo apreciaba un "beneficio significativo con muy poco riesgo" en la población vulnerable.
La conclusión a la que llegó se produjo después de analizar otros países donde ya se estaba inoculando la cuarta dosis, como Israel, que se la pone a mayores de 50 años; Reino Unido, a mayores de 75 años; o Alemania, a mayores de 60.
La recomendación de la experta se debe a que la respuesta inmunitaria disminuye con el tiempo y a que la variante Ómicron ha demostrado ser resistente a la inmunidad que proporcionan las vacunas Covid-19 que ya existen.
