El teléfono es el 900 018 018. Dirigido a alumnos, padres, profesores y en general a cualquier persona que conozca casos de malos tratos o de violencia en las aulas, las llamadas van a ser atendidas por psicólogos, juristas, sociólogos y trabajadores sociales. Los casos más graves se derivarán a las fuerzas y cuerpos de seguridad.
Con todos los datos que se reciban, se elaborará un registro y las cifras se verán en el Observatorio Estatal de Convivencia Escolar, que lleva sin reunirse desde 2011.
Se trata de un teléfono adaptado a personas con discapacidad auditiva y del habla que van a disponer de servicios de mensajería de texto, videollamadas o videochat.