Los hechos se produjeron este pasado lunes a primera hora de la tarde, en un local de la calle Alcoy de Gandía. La madre se encontraba junto a su hijo menor "en evidente estado de embriaguez" tras haberse tomado varias cervezas.
El niño empezó a llorar y la mujer presuntamente rompió un botellín y amenazó a su hijo con cortarle el cuello si no paraba, por lo que varios testigos avisaron a la Policía Local. En ese momento, la sospechosa intentó huir del local y fue retenida.
Tras comprobar la versión de los presentes, los agentes detuvieron a la madre por un presunto delito de amenazas en el ámbito familiar y derivaron el caso a la Policía Nacional. Esta mujer reside en Gandía pero procede de Madrid, por lo que no tiene familiares en la localidad, según las mismas fuentes.
Los policías la trasladaron a la comisaría a la espera de localizar a algún allegado, mientras que el niño quedó en la unidad de las dependencias destinadas a menores hasta que la familia se haga cargo o sea derivado a los servicios sociales de la Generalitat Valenciana.