Fuentes policiales han informado de que los hechos tuvieron lugar la semana pasada en el Mercado Central de Castellón, cuando el denunciante estaba trabajando en una de las paradas de la sección de pescadería.
El denunciante -de 23 años de edad- ha explicado que su expareja entró al mercado con una bolsa en la mano en la que había una sustancia triturada y cogió un puñado "y me lo tiró a la cara" al tiempo que le gritaba "hijo puta".
El hombre ha asegurado que escuchó algo sobre "pipas de calabaza" y se excusó para fumar un cigarro y empezó a notar como se le hinchaba la cara por lo que acudió al servicio de urgencias del centro médico más cercano.
Allí recibió atención médica, le fueron inyectados antihistamínicos y se le limpió la cara y los ojos.
Después volvió a trabajar y cuando acabó su jornada -ya que no quería dejar "tirado" a su jefe ha afirmado- acudió a denunciar a su expareja.
La Policía Nacional ha confirmado que, a la vista de los hechos, que ocurrieron frente a numerosos testigos, se procedió a la detención de la mujer por un presunto delito de lesiones, aunque quedó posteriormente en libertad.
Al parecer pesaba sobre el denunciante una orden de alejamiento con respecto a su expareja, que le había denunciado por presuntos malos tratos.