La mujer, detenida como autora de un presunto delito continuado de estafa y un delito continuado de robo, utilizó las tarjetas bancarias para realizar apuestas en internet por un importe de 2.027 euros, según ha informado hoy la Guardia Civil. El matrimonio había denunciado que, al revisar sus pertenencias, se percataron de que les habían sustraído gran cantidad de piezas de oro.
La detenida vendió 14 piezas de oro en distintos establecimientos de compraventa y la investigación policial está comprobando si son las mismas que fueron denunciadas por las víctimas.
Diez de los contratos localizados, por un importe total de 2.543 euros, no han podido ser recuperados por haber sido las piezas fundidas. Los cuatro contratos restantes sí han sido recuperados por parte de las autoridades, y su valor asciende los 2.665 euros.