Los hechos, según ha informado Emergencias Sevilla en su perfil en las redes sociales, tuvieron lugar sobre las 19,30 horas del pasado jueves, cuando una patrulla de agentes motorizados que se encontraba en la avenida de las Ciencias observaron como un vehículo circulaba haciendo zigzag, siendo advertidos por otros conductores de que su conductor debería de ir ebrio. Este conductor rebasó en rojo un semáforo ubicado a escasos metros de los agentes.
Ante tal situación, los agentes salen tras él alcanzándole rápidamente. Tras darle el alto y tomar contacto con el conductor, le apreciaron síntomas claros de estar bajo los efectos del alcohol. El propio conductor reconoció que venía de celebrar que había conseguido ganar un premio y que podrían llegar a un acuerdo para que no pasara nada, insistiendo en ello reiteradamente. Actitud ésta que los agentes ignoraban y le conminaban a que abandonase.
Al llegar el furgón de alcoholemia, habilitado para la realización de dichas pruebas, "se tornó más agresivo, insultando al agente con el que mantenía contacto directo, a quien primero le dio varios golpecitos en el pecho". Al pedirle que se separara y mantuviera la distancia de seguridad, "respondió de forma sorpresiva lanzando varios puñetazos al estómago y pecho del agente".
Ante esto, los agentes procedieron a su inmovilización y detención. Dos de los agentes resultaron lesionados leves. Tras realizar la prueba de alcoholemia, arrojó un resultado positivo que triplicaba el máximo permitido, siendo trasladado hasta dependencias policiales, donde quedó a disposición judicial. El vehículo fue trasladado hasta los Almacenes Municipales donde quedó depositado.