Los Agentes de la Policía Nacional han detenido en Sant Vicent del Raspeig al dueño y al encargado de una empresa alicantina de palés. Según ha informado la Policía en un comunicado, la empresa contrataba ilegalmente a obreros senegaleses que, bajo amenazas, trabajaban sin estar dados de alta en la Seguridad Social en condiciones de semi-esclavitud, con jornadas laborales de hasta 12 horas diarias que eran pagadas entre 0,58 céntimos y 2,5 euros la hora.
Al parecer, los obreros eran reclutados por el encargado de la empresa -también de origen senegalés-, que les ofrecía trabajo reparando palés en la empresa del otro detenido, lugar donde supuestamente les amenazaba de muerte si protestaban por el paupérrimo sueldo que percibían.
Además, tampoco podían faltar al trabajo por enfermedad o, como declararon algunas víctimas, por ir a vacunarse contra el coronavirus debido a que, de hacerlo, les descontarían 25 euros del ya menguado sueldo.
La investigación policial
A inicios del mes de julio, una de las víctimas de este régimen de semi-esclavitud decidió denunciar la situación, motivo por que que los Agentes de la Policía Nacional abrieron la investigación.
El Grupo 3 de la Unidad Contra las Redes de Inmigración y Falsedades Documentales (UCRIF-3) de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Comisaría Provincial de Alicante asumió dicha investigación estableciendo un discreto dispositivo de vigilancia sobre la empresa y el supuesto lugar donde el empresario recogía a los trabajadores para llevarlos a su nave del polígono industrial de El Canastel.
A raíz de estas vigilancias efectuadas, los investigadores pudieron concretar que, en un punto del barrio de Virgen del Remedio de Alicante, el empresario recogía con la furgoneta de la empresa a un grupo de individuos de origen africano, todos los días a la misma hora. Desde allí, se desplazaban hasta la nave donde permanecían hasta las 19.00 horas, momento en que los llevaba de nuevo hasta el punto de recogida.
Las pesquisas realizadas pudieron determinar que estas personas no estaban dadas de alta en la Seguridad Social, realizaban turnos de doce horas seguidas y percibían un salario de entre 600 a 700 euros al mes, lo que supone una retribución de unos 2,5 euros la hora en el caso de trabajar todos los días. Si hacían once días en jornadas de 12 horas recibían 0,58 euros por cada hora.
Resolución del caso
Una vez obtenidos todos los indicios, los agentes coordinaron la investigación con la Inspección de Trabajo de Alicante para realizar una inspección en la empresa. La explotación del operativo se saldó con la la identificación de los siete trabajadores que había allí bajo las condiciones descritas y con la detención del empresario de la localidad alicantina de Sant Vicent del Raspeig y del encargado de la empresa, acusados de sendos sendos delitos contra el derecho de los trabajadores y amenazas.
El empresario detenido, un español de 43 años y sin antecedentes previos, ha sido puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de la localidad junto con el encargado, un senegalés de 44 años que ya tenía antecedentes penales.