Las 2.002 plantas de marihuana han pesado 622.900 kilos, con los cuales hubieran generado en el mercado 2.491.000 dosis, según informa en un comunicado la Guardia Civil.
Las plantas, en distintos estados de crecimiento, estaban distribuidas en cuatro habitaciones, construidas en el interior de la nave, que ha quedado precintada por la Guardia Civil, para proceder al desmontaje de las instalaciones eléctricas, filtros de aire y demás aparatos.
Además, la nave está siendo revisada por personal de la empresa eléctrica Endesa, precisando que en las mismas existe un "enganche" ilegal de electricidad. La operación sigue abierta, y la Guardia Civil no descarta que se puedan producir nuevas detenciones.