Los hechos se produjeron poco antes de las doce de la noche, cuando una patrulla de la Ertzaintza, que realizaba funciones de seguridad y control del tráfico, observó cómo un camión accedía a un área de servicio, ubicada en el polígono Zaisa en Irun, en sentido contrario al establecido.
El recurso policial se dirigió al citado vehículo para identificar al conductor y comprobó que éste presentaba síntomas de encontrarse bajo la presunta influencia de las bebidas alcohólicas. En las correspondientes pruebas de detección, el implicado arrojó sendas tasas de 1 y 0,95 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, más de seis veces superior a la permitida para este tipo de vehículos. Por tal motivo, se procedió a su detención.