La detención se produjo en el mes de diciembre. Tras una ardua investigación de meses, la Policía consigue identificar y detener a este joven de origen ecuatoriano que sólo tiene 22 años, pero que ya está en la cárcel por ser el responsable de abusar sexualmente de cuatro jóvenes y violar a otra a la salida del Metro de Opañel.
Todas las víctimas tienen menos de 20 años y dos de ellas son menores de edad. En el registro de la vivienda del detenido, la Policía encontró varias prendas de ropa que vestía en el momento de los ataques y que han sido reconocidas por las víctimas.
Tal y como relata el portavoz de la Jefatura Superior de Policía, el modus operandi era siempre el mismo: "Elegía a sus víctimas en el interior del suburbano y, tras salir de la estación de Metro de Opañel, aprovechaba la oscuridad de la noche y las seguía durante unos metros y las abordaba por la espalda. En algunas ocasiones, las dejaba sin respiración y las tiraba al suelo para agredirlas sexualmente. Finalmente, las amenazaba de muerte si le reconocían o identificaban ante la Policía".
Abordaba a las chicas cuando regresaban a casa de madrugada, o bien a última hora de la noche o a primera hora de la mañana. A algunas de las víctimas les robó el móvil y el dinero. Dos de ellas fueron atacadas la misma noche con un intervalo de 30 minutos, en febrero de 2016. Un mes después, y en el mismo día, volvió a actuar contra dos jóvenes.
La última agresión sexual se produce el mes de junio. La Policía no descarta que pueda ser el autor de otras agresiones.